Excepciones en publicidad y áreas para fumar no han inhibido el hábito, según la OPS
Martes 12 de abril de 2016, p. 33
El consumo de tabaco no ha cambiado en México en los seis años que tiene de vigencia la ley general para el control de la adicción. Alrededor de 14 millones de personas mayores de 15 años fuman, aunque lo hacen menos: 7.7 cigarros por día en 2015, comparados con 9.3 en 2009. En cambio, la edad de inicio del consumo sigue a la baja: pasó de 17.6 a 16.5 años en promedio en el mismo periodo.
Revela lo anterior la Encuesta Global de Tabaquismo en Adultos, cuyos resultados están listos desde hace seis meses y aún no se han dado a conocer de manera oficial. Ayer, Eduardo Lazcano y Luz Miriam Reynales, investigadores del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), encargado de realizar el estudio, presentaron en la Cámara de Diputados algunos datos, entre los que destaca que aumentó la cantidad de personas que intentaron dejar de fumar. Pasaron de 49.9 a 56.9 por ciento, pero muy pocos lo lograron.
Menos consumo de medicamentos
Incluso disminuyó el uso de medicamentos para dejar la adicción de 6.2 a 3.5 por ciento.Que no haya habido cambios importantes en el nivel de tabaquismo en México se debe a las excepciones que permite la ley como las áreas para fumar en espacios públicos cerrados y algunas formas de publicidad de cigarros, afirmó Adriana Blanco, de la Oficina para el Control del Tabaco de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Al participar en la mesa de trabajo Políticas públicas para el control del tabaco, organizado por la diputada Maricela Contreras (PRD), y ante los presidentes de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, y de la Junta de Coordinación Política, César Camacho Quiroz, la ejecutiva de OPS señaló que las acciones para abatir el consumo son efectivas cuando se aplican en forma combinada y como parte de una estrategia integral.
Los países que cumplen con el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT), iniciativa de la Organización Mundial de la Salud, han obtenido mejores resultados, dijo.
Un aspecto donde México está rezagado es en el tamaño de los pictogramas, pues deberían ocupar al menos la mitad del espacio físico disponible en las dos caras de las cajetillas de cigarros. Actualmente las imágenes se ubican en 30 por ciento de la cara frontal.
También hace falta actualizar el monto del impuesto al consumo de productos del tabaco. El gravamen se aplica desde 2011, pero no está indexado a la inflación, por lo que se mantiene igual desde entonces.
Urge actulizar la norma
En el acto, donde también estuvo el titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones, Manuel Mondragón, los legisladores Zambrano y Camacho Quiroz coincidieron en que se debe actualizar la Ley General para el Control del Tabaco, a fin de que las medidas sirvan para abatir el consumo.
Zambrano retomó datos oficiales para señalar los riesgos a la salud asociados con la adicción a la nicotina, mientras Camacho planteó que los costos económicos de este problema de salud son cada vez mayores.
Recordó que en la Cámara de Diputados están pendientes de discusión cuatro iniciativas de reforma legal, las cuales coinciden en lo sustantivo, por lo que es factible alcanzar un acuerdo para avanzar en esta materia.
Se encontró que a pesar de que por ley los lugares de trabajo interiores deben estar libres de humo de tabaco, los no fumadores expuestos se mantuvieron casi igual, de 18.6 pasaron a 17 por ciento en el periodo de estudio.
En otros espacios públicos cerrados se observó la disminución de exposición al humo de tabaco ajeno. En edificios de gobierno pasó de 17 a 14 por ciento; en restaurantes, de 29.6 a 24.6, y en bares y discotecas, de 81.2 a 72.7 por ciento. En los hogares, los no fumadores se beneficiaron con la disminución de 14.1 a 9.5 por ciento de emisiones de humo.