El crédito que otorgó el Banco Mundial (BM) para la modernización del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) –dependiente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua)– se canceló, tres años después de que no se ejerció un solo dólar de los 105 millones autorizados. Para llevar a cabo este proyecto, ahora se buscarán asociaciones público-privadas y el establecimiento de la Agencia Mexicana de Huracanes y Tormentas Severas, entre otras acciones, precisó el organismo federal.

La decisión se tomó entre febrero y marzo de este año por funcionarios de la Conagua, el BM y la Secretaría de Hacienda. La Conagua observó que no había relación entre las necesidades actuales del SMN y el proyecto original, además de que no estaba apegado a las recomendaciones que hizo la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

Informó que se llegó a considerar la restructuración del crédito, así como la redefinición de las líneas de acción de los componentes de la Modernización del Meteorológico (MoMet); sin embargo, adaptar el proyecto implicaba un cambio que, en los hechos, llevaba a un nuevo plan, lo cual, de acuerdo con la norma del organismo internacional, significaba la tramitación de un nuevo crédito.

Sin respuesta del organismo internacional

Por lo anterior, se determinó que el MoMet, con el crédito externo del Banco Mundial, ya no era viable. No obstante, desde el 23 de marzo se pidió a la oficina del BM en México su posición sobre este tema; no hubo respuesta.

Ahora, ya sin estos recursos, la Conagua informó que trabaja en varias líneas estratégicas para continuar la modernización en los próximos tres años. Se propondrá el cambio de atribuciones y funciones del SMN, para establecer la Agencia Mexicana de Huracanes y Tormentas Severas y los Centros Hidrometeorológicos Regionales.

Apuntó que se considera el fortalecimiento del capital humano, por lo que, con apoyo de la OMM, se trabaja en la formación y capacitación del personal técnico. Se buscará trabajar con aplicaciones y en una asociación público-privada para la obtención de datos. Otras líneas, indicó la Conagua, serán alianzas estratégicas que permitan mejorar el desempeño del SMN mediante convenios de colaboración con instituciones ligadas a la meteorología y climatología, tanto nacionales como extranjeras.

El crédito del BM se formalizó en diciembre de 2012, con vigencia a diciembre de 2017. Sin embargo, desde el primer año señalado hasta abril de 2015 –periodo en el que David Korenfeld estuvo al frente de la Conagua– no hubo ningún avance. Incluso, hay versiones de que el ex funcionario desdeñaba el tema y las reuniones con los funcionarios del BM. Aunque la página de Internet del BM refiere un ejercicio de 4.35 millones de dólares, la Conagua precisó que los recursos no se tocaron.

Con ellos se buscaba impulsar el proyecto elaborado por la OMM en 2010 para desarrollarse en una década. Planteaba cuatro líneas estratégicas: el fortalecimiento institucional del SMN; la consolidación y fortalecimiento de infraestructura y equipamiento; el desarrollo de productos y servicios, y lo relativo a clima y al cambio que éste sufre, con lo cual se obtendrían beneficios como reducir los riesgos por efectos climáticos y desastres naturales derivados de fenómenos hidrometeorológicos.

Se perdieron tres años de trabajo, pese a la urgencia planteada para la adaptación ante el calentamiento global y el incremento de desastres naturales en el país, donde 55 por ciento de los municipios (mil 385) son vulnerables a inundaciones, deslaves, sequías agrícolas y ondas de calor, de acuerdo con el Plan Especial de Cambio Climático (PECC) 2014-2018. Tan sólo entre 2005 y 2015, las pérdidas a causa de este tipo de eventos ascendieron a 412 mil millones de pesos, según el Centro Nacional de Prevención de Desastres.

En México hay apenas unos 300 meteorólogos y cada año egresan 15 de la Universidad Veracruzana, donde se imparte la especialidad, para un país de más de 100 millones de habitantes, indica información de José Antonio Salinas del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).