Viernes 1º de abril de 2016, p. 2
Mountain View, EU.
Científicos estadunidenses quieren ampliar la búsqueda de vida extrate-rrestre, para lo cual en los próximos dos años estudiarán 20 mil estrellas enanas rojas con el objetivo de encontrar señales radioeléctricas artificiales, según informó el instituto Seti el miércoles en Montain View.
Los investigadores del centro de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre (Seti por sus siglas en inglés) auscultan desde 1984 el universo en busca de vida, hasta ahora sin éxito. Con la gran campaña de observación que plantean ahora quieren ampliar su búsqueda a las estrellas enanas rojas.
Los especialistas de este instituto sin ánimo de lucro trabajan con modernos radiotelescopios para intentar interceptar señales radioeléctricas.
“En el pasado, las estrellas rojas –relativamente frías– recibieron relativamente poca atención de los investigadores del Seti”, explicó en un comunicado Jon Richards, uno de los trabajadores del instituto. Eso se debe a que los científicos hicieron la suposición aparentemente posible de que otras espe- cies inteligentes se encontrarían en planetas que orbitan estrellas similares al Sol
, agregó.
Zonas habitables
Las enanas rojas no se consideraban un destino prometedor, ya que sus zonas habitables son mucho más escasas que en estrellas más grandes. Los astrónomos consideran zonas habitables las áreas alrededor de las estrellas en las que las temperaturas permiten la existencia de agua líquida, requisito para la existencia de vida tal como la conocemos.
Incluso aunque podría haber planetas en la zona habitable de una enana roja, estos orbitan tan cerca de sus astros que normalmente siempre muestran la misma cara a la estrella. Eso supondría, según los astrónomos, que en la cara diurna haría un calor insoportable y en la nocturna un frío gélido, lo que daría malas condiciones para la existencia de vida.
Nuevos descubrimientros muestran, sin embargo, que los posibles océanos y atmósferas de esos planetas podrían distribuir mejor de lo que se pensaba el calor entre las caras diurna y nocturna, apunta el Seti. Según las investigaciones actuales, una de cada seis enanas rojas tie- nen planetas en su zona habitable.
Además, estas estrellas brillan durante mucho tiempo, la media es de varios miles de millones más que las similares a Sol.