Diez días después de que venció el plazo legal y luego de una accidentada negociación, las tres principales fuerzas políticas en el Senado llegaron a un acuerdo y se nombró a cinco magistrados de las salas regionales del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), de la Ciudad de México, Toluca, Xalapa, Monterrey y Guadalajara.

La negociación se prolongó todo el día y el PRD amenazó incluso con tomar la tribuna cerca de las 15 horas, ya que PRI y PAN habían acordado repartirse los nombramientos. Tres de ellos para el grupo que coordina Emilio Gamboa Patrón y dos para el panista Fernando Herrera.

El coordinador perredista, Miguel Barbosa, advirtió a Gamboa que no permitirían la votación de los magistrados y radicalizarían sus posturas. Se reinició la negociación y se revisó la terna de la sala de Xalapa, en la que PAN y PRI habían decidido que el nombramiento recayera en José Luis Ceballos Daza, sobrino del magistrado de sala superior, Constancio Carrasco Daza.

Hubo un cambio y se acordó nombrar a Enrique Figueroa Ávila, del grupo de María del Carmen Alanís –ex presidenta del TEPJF–, quien resultó el mejor posicionado durante la comparecencia de los 15 candidatos.

En el caso de la sala regional de la Ciudad de México, el nombramiento fue para María Guadalupe Silva Rojas, cercana al presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth, quien peleó por ella, aun dentro de su bancada.

El nuevo magistrado en la sala de Toluca es Alejandro David Avante Juárez, posición que el consejero jurídico de la Presidencia, Humberto Castillejos, defendió personalmente y que el PRI mantuvo como prioridad en la negociación.

Para el PRI fue también la sala regional del TEPJF, con sede en Monterrey, donde se nombró a su candidata Claudia Valle Aguilosocho.

En la sala regional de Guadalajara se nombró magistrada a Gabriela Eugenia del Valle Pérez, a quien impulsó el PAN.

Una vez resuelta la negociación, que confrontó por semanas a PRI, PAN y PRD, se procedió a votar los nombramientos, por cédula