La zona metropolitana del valle de México ha entrado en emergencia ambiental y de salud a consecuencia de la profunda corrupción en los centros de verificación vehicular, que han permitido la entrada en circulación de más de 600 mil vehículos y un modelo de transporte que privilegia al auto.

Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor, señaló que las modificaciones al programa Hoy no circula, por una resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y la venta de engomados cero y doble cero entre 500 y mil 500 pesos, han disparado la circulación de vehículos altamente contaminantes.

Con ello aumentó el tránsito, disminuyó la velocidad de circulación y se incrementaron las emisiones por kilómetro recorrido, llegando a una contingencia ambiental que no se había dado desde hace 14 años, por lo cual es necesario fijar penas más severas contra esos verificentros.

El retiro de las licencias de operación, multas y hasta penas de cárcel podrían ser algunas alternativas para cerrar el paso a la corrupción, dijo.

Además, están los influyentes grupos de interés formados por la gran industria automotriz, que han obstaculizado la actualización de las regulaciones que más beneficios podrían traer a la población, al medio ambiente y a la competitividad del país, afirmó Stephan Brodziak, coordinador de la campaña aire limpio de la organización.

Propusieron cerrar áreas de la ciudad a la circulación de automóviles, establecer un fondo metropolitano para la promoción y el desarrollo del transporte público transparente y aplicar impuestos a estacionamientos, parquímetros, combustible y autopistas urbanas.