Acapulco, Gro.

La mitad de los trabajadores formales que obtienen un crédito tradicional con el Instituto del Fondo Nacional para el Consumo de los Trabajadores (Infonacot) lo utiliza para comer debido a sus bajas percepciones laborales que no les permiten siquiera solventar sus necesidades básicas.

En entrevista en el contexto de la clausura de la 79 Convención Bancaria, el director del Infonacot, César Alberto Martínez Baranda, informó que el trabajador se está endeudando para satisfacer sus necesidades primarias, que es la comida que debería de cubrirlas de otra forma y destinar el crédito para la adquisición de bienes de consumo duradero o para pagar un servicio, o sus vacaciones o la educación de sus hijos.

Lo anterior, dijo, se atribuye al bajo poder adquisitivo del trabajador debido a que el salario que percibe no le permite cubrir al menos sus necesidades básicas. Sin embargo, aseguró que este sector es buen pagador. El obrero lo que quiere es salir de la deuda lo más rápido posible y que no le vayan a enviar a un abogado o a quitarle los bienes que compró, porque eso va en perjuicio de su familia, y es muy consciente de eso.

Consideró que el sistema financiero mexicano tiene que ser muy precavido por la incertidumbre que prevalece porque no sabemos qué pueda pasar y tenemos que prestar con más calidad para cuidar la estructura de las instituciones financieras, porque hoy es un sistema robusto, sólido y eso nos ha tomado mucho tiempo. Ahorita viene un problema global y no tarda en llegar aquí y lo que tenemos que hacer es prestar con cautela para no sobrendeudar y recuperar los créditos.

Recordó que el Infonacot es una institución financiera para los trabajadores que no pueden acceder a un crédito de un banco. Precisó que en lo que va de la actual administración se han colocado 38 mil 600 millones de pesos en créditos promedio de 12 mil 400 pesos a plazos promedio de 20 meses.

Martínez Baranda aseguró que los tasas que cobra el Infonacot son muy competitivas porque el costo anual total (CAT) se ubica 21 puntos porcentuales por abajo del promedio de las tarjetas de crédito, que cobran alrededor de 47 por ciento.

Tenemos plazos de seis meses en los que se cobra 9 por ciento anual y hay plazos de 36 meses en los que se cobra 27 por ciento anual, añadió.

Comparado con los créditos al consumo que otorgan tiendas como Famsa, Coppel, Chedraui, que están arriba de un CAT superior a 100 por ciento, el Infonacot está mucho más abajo.

El problema por el que tenemos que ser muy prudentes es que si viene una oleada de desempleo tenemos que ofrecerles a los trabajadores planes de salida muy inteligentes. La banca no puede seguir dando crédito como lo habíamos venido dando en los últimos cinco años porque ahora la situación es completamente diferente, advirtió.

Para acceder a un crédito con el Infonacot el trabajador nos tiene que demostrar que está en activo y lo ratificamos con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) o con el Issste y luego le otorgamos un préstamo con base a la capacidad de endeudamiento que tenga y cobramos a través de la nómina.

En caso de que el trabajador se quede sin empleo hay dos esquemas de salida: si paga en una sola exhibición se le hace una condonación de 30 por ciento, pero si no la puede pagar así pero sigue al corriente en sus mensualidades puntualmente el plazo se puede extender por 20 meses más y se le ofrece un descuento de 20 por ciento en cada pago.

Señaló que 50 por ciento de los trabajadores que pierden el empleo se acogen a estos dos programas y el 50 por ciento restante prefiere destinar sus ingresos para darle de comer a su familia y eso es entendible porque el objeto del instituto es social. Sin embargo, cuando el trabajador se reintegra a la economía formal se reactiva la cobranza y con ello entran recursos nuevos y propios, lo que le ha permitido bajar las tasas de interés.

No hay ninguna institución financiera como bancos, Sofomes o Sofipos que esté prestando más abajo que nosotros, destacó .

Además, al contratar un crédito va acompañado de un seguro que en caso de que quede desempleado la aseguradora paga por cuenta y orden del trabajador seis mensualidades. Eso hace que tengamos una cartera más sana y que registremos mejores niveles de cartera vencida y eso hace que el trabajador se ocupe por obtener trabajo y no esté preocupado por pagar el crédito. El costo de la prima es equivalente a una mensualidad, lo que lo hace muy accesible.

Adicionalmente, los trabajadores pueden obtener un crédito con el Infonacot aún estando en el Buró de Crédito, pero el préstamos es por montos más pequeños y a un plazo máximo de seis meses.

Por otro lado, un trabajador que no tenga deudas puede acceder a un monto equivalente hasta de cuatro meses de sueldo y es desde un director de empresa hasta el obrero más modesto.

Sobre los principales indicadores del Infonacot, César Alberto Martínez informó que el año pasado se colocaron en créditos nuevos 14 mil 200 millones de pesos en créditos promedio de 12 mil 400 pesos. “Tenemos un nivel de cartera vencida de 4.1 por ciento contra un promedio nacional de la banca de consumo está por arriba de 7 por ciento. Tenemos un índice de cobertura de 122 por ciento del valor total de la cartera y una a rentabilidad de 32 por ciento, con una utilidad neta de mil 800 millones de pesos, que acumulada en la actual administración es de 7 mil millones de pesos.

Ante estos resultados el próximo 17 de abril se planteará al consejo aumentar el capital de 660 millones a 3 mil 900 millones de pesos.