Organizaciones sociales y diversas personalidades condenaron el asesinato de Berta Cáceres, coordinadora general del Consejo Indígena de Organizaciones Populares de Honduras (Copinh).

En un pronunciamiento conjunto, repudiaron la violencia y persecución sistemática que ejerce el gobierno de aquella nación hacia los luchadores sociales, acciones que le convierten en el país con el mayor número de asesinatos de defensores del medio ambiente en todo el mundo.

Demandaron el esclarecimiento de los hechos, castigo y debido proceso a los autores intelectuales y materiales del asesinato de la activista, así como la implementación de las medidas necesarias para garantizar la seguridad de su familia y de sus compañeros de lucha.

En este momento tan doloroso e indignante, refrendamos nuestra solidaridad y apoyo total para la familia de Berta, al pueblo lenca, al Copinh y demás espacios y organizaciones de Honduras que día a día defienden su territorio ante las amenazas de despojo y destrucción que enfrentamos permanentemente en esta subordinación de nuestra vida y derechos a los intereses de las trasnacionales.

Destacaron que una de las mayores luchas de Cáceres fue la organizada en contra de la represa de Agua Zarca, cuando logró que la constructora china Sinohydro y la Corporación Financiera Internacional, institución del Banco Mundial, abandonaran el proyecto debido a la oposición comunitaria del pueblo lenca.

Berta recibió reiteradas amenazas de muerte, persecución política y órdenes de detención, subrayaron.

Firmaron el texto el obispo Raúl Vera López, Javier Sicilia, Daniel Giménez Cacho, Gilberto López y Rivas, Sophie Alexander-Katz, Carmen Mendoza, Alfonso Anaya, Walter Martínez, Cecilia Bonilla y Jesús García.

También, el Comité 68 Pro Libertades Democráticas, Jóvenes ante la Emergencia Nacional, El Grito Más Fuerte, Asamblea Nacional de Afectados Ambientales, Mujeres para el Diálogo, Observatorio Eclesial, Secretariado Social Mexicano y el Comité Monseñor Romero, entre otros.