Ante el presidente Enrique Peña Nieto, el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, se disculpó ayer por los planteamientos antimigrantes que se han pronunciado en la campaña por la Casa Blanca. El discurso de uno de los aspirantes en contra de los mexicanos no representa el punto de vista de la gran mayoría de los estadunidenses, dijo en alusión al precandidato republicano Donald Trump.

Por otra parte, dijo que su gobierno continuará al lado de México en la lucha contra los traficantes y recordó que lo ha respaldado para mejorar su capacidad de desmantelar los cárteles y las organizaciones criminales.

Al iniciar la tercera reunión del Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN) México-Estados Unidos, que se realizó en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), luego de entrevistarse en privado con el jefe del Ejecutivo federal en la residencia oficial de Los Pinos, Biden calificó de ‘‘peligroso, daniño y una idea muy mal concebida’’ el discurso de uno de los precandidatos a la presidencia de su país.

Sin mencionar al republicano Trump por su nombre, consideró que sus propuestas afectan las relaciones de Estados Unidos con otras naciones.

‘‘Si el pueblo de México cree que la mayoría de nuestra población no lo respeta, está equivocado. Sí lo respeta’’, enfatizó el político, quien realizó una visita al país de menos de 24 horas, pues llegó el miércoles a la medianoche y ayer por la tarde partió rumbo a Salt Lake City, Utah.

El vicepresidente estuvo acompañado por secretarios y subsecretarios de estado que participaron en el DEAN, entre ellos Roberta Jacobson, subsecretaria para Asuntos del Hemisferio Occidental, quien fue designada embajadora en México, pero su nombramiento está detenido en el Senado estadunidense.

Joseph Biden manifestó que en la carrera por la Casa Blanca ha habido ‘‘mucha retórica dañina y desacertada, y casi siento la obligación de ofrecer disculpas por esta campaña… en la que se ha hablado sobre los mexicanos’’. Tras estimar que el proceso electoral ha sido arduo, insistió en que los planteamientos ‘‘calurosos’’ de uno de los precandidatos no representan a quienes ‘‘somos el pueblo de Estados Unidos’’.

En sus intervenciones, tanto en la SRE como en Los Pinos, resaltó el valor de la migración y dijo que su nación es fuerte porque es un país multicultural. De igual manera se refirió a las declaraciones del papa Francisco en torno a que no es de cristianos crear muros, pero sí construir puentes. ‘‘Como nación, eso es lo que hay que hacer’’, abundó.

Tras dialogar en privado con el presidente Peña Nieto, y luego de participar en una reunión ampliada con las delegaciones de los dos países, el vicepresidente elogió al mandatario mexicano por las reformas aprobadas. Destacó que la relación entre los dos países ha llegado al punto en el que cada uno comprende que se beneficia del éxito del otro.

No hay nada que Estados Unidos quiera más que el continuo éxito y crecimiento de México, porque en la medida en que esto ocurra, todo internamente en México se mejora al igual que en la frontera y el resto de Norteamérica, dijo. Biden expresó que los vínculos entre ambas naciones no son como hace 30 o 40 años y que ya no se trata de qué ‘‘podemos hacer por México’’, pues está en situación de igualdad, sino de ver qué puede hacer uno por otro. ‘‘Los necesitamos a ustedes tanto como esperamos que nos necesiten a nosotros’’, puntualizó. En los últimos años, expuso que los avances económicos de los dos países han sido muy importantes.

Por último, manifestó que lo que hagan ambas naciones redundará en beneficio de América Latina y el Caribe.

El vicepresidente subrayó que la relación con México es de la más alta prioridad para el presidente Barack Obama y para Estados Unidos. ‘‘Y será así, no importa qué más pase en el mundo, ni qué otra crisis exija nuestra atención. Ésta es una relación importantísima, política, económica y estratégicamente hablando’’.