La propuesta original planteaba el retiro de todos los funcionarios locales
Permitieron un fraude cibernético en comicios de 2015, según la acusación contra ellos
Sábado 20 de febrero de 2016, p. 11
El Instituto Nacional Electoral (INE) removió sólo a tres consejeros de Chiapas, de los siete propuestos para dejar sus cargos, por no haber impedido que se cometiera un fraude cibernético con el voto desde el extranjero.
Aunque una mayoría de siete consejeros nacionales estuvo de acuerdo en remover a todos los consejeros del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana de Chiapas (IEPC), faltó un voto para que ésto se concretara. La norma establece que estas remociones deben ser definidas por ocho integrantes del Consejo General.
Así que un voto marcó la diferencia y fue alguno de los consejeros Marco Antonio Baños, Benito Nacif, Enrique Andrade y Javier Santiago, que plantearon definir responsabilidades en lo individual y salvaron a la mayoría de los implicados en este fraude y en otras anomalías.
Dejarán sus cargos Carlos Enrique Domínguez, Ivonne Miroslava Abarca Velázquez y Margarita Esther López Morales. Y se mantendrán María de Lourdes López Urbina, Lilly de María Chang, Jorge Manuel Morales y María del Carmen Girón López.
Los derrotados, después de una discusión de cuatro horas, fueron el consejero presidente, Lorenzo Córdova, y sus colegas Ciro Murayama, Pamela San Martín, Adriana Favela, Beatriz Galindo , José Roberto Ruiz Saldaña y Arturo Sánchez.
La consejera presidenta de Chiapas y los seis consejeros son investigados desde julio del año pasado por no garantizar la equidad de género en el registro de candidaturas para los comicios en esa entidad.
A esta denuncia se sumó otra de mayor gravedad por la falsificación de un padrón de votantes y la manipulación de la elección para darle el triunfo a Roberto Pardo, del Partido Verde Ecologista de México, como diputado migrante, quien ya fue desaforado por ese motivo.
Pardo Molina es primo hermano de Vicente Manzur Molina, dueño de la empresa DSI Elecciones, acusada de la presunta falsificación del padrón de votantes. La consecuencia, como explicó el consejero Ciro Murayama, fue que se infló el padrón de electores en el extranjero y se rasuró el de los residentes en el estado, que fueron transferidos al primero.
Al ver que cinco consejeros planteaban salvar a algunos, Horacio Duarte, de Morena y quien presentó una de las quejas, señaló: Sería inmoral que este órgano no vote por la remoción de todos y sería una señal de impunidad
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Como él, la mayoría de los partidos políticos intervino a favor de destituir a todos los consejeros de Chiapas.
Un poco desesperado al ver las posiciones de sus colegas, el consejero presidente Lorenzo Córdova preguntó si no se considera de gravedad suficiente el que no se haya respetado la norma que obliga a postular candidatos paritariamente entre mujeres y hombres.
Pero de poco sirvieron los argumentos. Un voto hizo la diferencia.