or suerte, para quienes admiramos el trabajo de Martin Scorsese, este no se ha restringido al cine, sino que se ha diversificado en la televisión, dirigiendo videoclips, comerciales y, sobre todo, episodios de series. Su aportación a la televisión por cable más reciente es fungir de productor –junto con Mick Jagger, nada menos– de Vinyl, miniserie planeada para 10 episodios sobre la industria disquera neoyorquina de principios de los años 70.
Estrenada el domingo pasado en HBO, la serie debutó con un piloto de dos horas dirigido por el propio Scorsese. En él, Richie Finestra (Bobby Cannavale) se encuentra en un momento crítico. Solo, en su Mercedes deportivo, mientras bebe una botella de Chivas y se mete pericazos de coca, el afligido director de la compañía disquera American Century se mete a un antro en el Village, donde está tocando una nueva banda, llamada The New York Dolls. El derrumbe está por venir.
Una serie de flashbacks nos situará cinco días antes de la crisis, cuando Finestra está haciendo pláticas para vender su negocio a la globalizante compañía alemana PolyGram. Otro salto en el tiempo, muestra al protagonista en su inicio como cantinero, mientras descubre el talento de un bluesero, Lester Grimes (Ato Essandoh); es cuando decide volverse su mánager y entrar a la industria. No pasará mucho tiempo antes de que Finestra traicione a Grimes y lo obligue a grabar insulsas canciones de twist.
Aunque no se puede juzgar el primer episodio de una serie como un largometraje (aunque dure lo mismo), cabe apreciar en Vinyl su interés central: revelar los malos manejos que caracterizaron una industria primordial del entretenimiento de entonces. Así como hizo con Las Vegas en Casino (1995), Scorsese muestra el grotesco mundo de quienes impulsaron la música pop, valiéndose de diversas transas como la payola y el defraudar a un artista de sus derechos. Para ello, el argumento debido a Scorsese, Jagger, Rich Cohen y Terence Winter, no titubea en mezclar personajes reales con ficticios, resultando en apariciones fugaces –y divertidas– de actores interpretando a Robert Plant, Peter Grant y Bo Diddley, entre otros.
Que el episodio esté filmado con energía febril no debe sorprender a nadie, ya acostumbrado al dinámico estilo del director. Asimismo, si Scorsese fue de los primeros en utilizar canciones de todo tipo de género en la banda sonora, aquí encuentra la perfecta motivación para tapizarla de temas propios de la época, y aprovechar su fuerza para mantener la historia en estado constante de combustión.
Y si incontables cineastas le han robado ideas visuales, aquí Scorsese se cita a sí mismo con una serie de escenas y situaciones que hacen eco a su obra previa. No sólo Casino es una referencia. El espectador atento encontrará reflejos de Taxi Driver (1976), al fin que es la Nueva York del mismo periodo; Buenos muchachos (1990) y sus repetidos asomos de una violencia cruel, así como de un frenético tren de vida, y los documentales que ha hecho sobre intérpretes del pop/rock, que hablan de su pasión por el género.
Según podría esperarse de un programa piloto, algunas partes –la relación estreñida de Finestra con su aguantadora esposa Devon (Olivia Wilde), por ejemplo– se sienten como apenas apuntes a desarrollarse en futuros episodios. Mientras otras –la visita fastidiosa a la casa de un corrupto dueño de estaciones radiofónicas (interpretado con grasienta prepotencia por un irreconocible Andrew Dice Clay), que es demasiado parecida a una secuencia clave de Boogie Nights (Paul Thomas Anderson, 1997)– resultan excesivas.
El interés por la serie es innegable. Aunque el piloto es el único episodio dirigido por Scorsese, es de suponer que su espíritu dominará la miniserie aún más de lo sucedido con Boardwalk Empire (2010-2014), saga gansteril, también de HBO, que duró más allá de su atractivo inicial. Una prueba de ello es que uno quiere saber más sobre la caída –y posible redención– de Richie Finestra, otro de los personajes fracasados que han nutrido la galería Scorsese del héroe dañado.
Vinyl
Episodio piloto. D: Martin Scorsese/ G: Terence Winter, George Mastras, sobre un argumento de Rich Cohen, Martin Scorsese, Mick Jaggery y Terence Winter/ F. en C: Rodrigo Prieto/ M: Canciones varias/ Ed: David Tedeschi/ Con: Bobby Cannavale, Olivia Wilde, Ray Romano, Ato Essandoh, J.C. Mackenzie/ P: Home Box Office (HBO), Jagged Films, Cold Front Productions. EU, 2016.
*Con agradecimiento a Oscar Sarquiz
Twitter: @walyder