El quinto participante en el crimen cometido en 2015 fue declarado inimputable, por retraso mental
Sábado 20 de febrero de 2016, p. 25
Ciudad Juárez, Chih.
Los cuatro adolescentes que asesinaron al niño Cristopher Raymundo Márquez Mora, cuando jugaban al secuestro
el pasado 14 de mayo en Aquiles Serdán, Chihuahua, fueron sentenciados a nueve años y medio de prisión, determinó el juez Francisco de León Merino.
A los cuatro les impuso sentencia de tres años y seis meses de libertad asistida y están recluidos en el Centro Especializado de Reinserción Social para Adolescentes Infractores. Jorge Eduardo, el quinto adolescente que también participó en el crimen del niño de seis años, fue declarado inimputable pues padece retraso mental.
Los adolescentes confesaron que el crimen lo perpetraron en un arroyo aledaño al fraccionamiento Laderas de San Guillermo II etapa de ese municipio, donde con engaños lo llevaron a jugar. Una adolescente de 13 años lo apuñaló por la espalda, luego lo enterraron y cubrieron con la maleza para disimular el mal olor.
La sentencia se dictó en la causa penal 95/2015 en una audiencia de juicio abreviado que se extendió 17 horas –con ocho recesos–, realizada a puerta cerrada en la sala 17 de juicios orales, localizada en las instalaciones del Centro de Rehabilitación Social (Cereso) uno de Aquiles Serdán.
Sólo acudieron los padres y familiares cercanos de los cuatro menores procesados con las agravantes de traición, premeditación, alevosía, ventaja y saña. El juez De León hizo un extrañamiento a los padres de ser los responsables de su cuidado.
El juez especializado en menores que cometen delitos en el actual sistema penal acusatorio determinó que Jorge Eduardo tiene retraso mental moderado que requiere atención, pues su lenguaje corresponde a un niño de cinco años.
Los apellidos de los cuatro menores: Jorge Eduardo y Jesús David, Valeria Janeth y Alma Leticia, de entre 12 y 15 años, se omiten por la ley en el estado.
Una condicion para el juicio abreviado, según el sistema de justicia penal vigente, es que los imputados acepten su responsabilidad en la comisión del delito, en este caso homicidio calificado
, lo que acorta el tiempo de la sentencia y evita el desarrollo de todo el juicio, con el beneficio final de reducir la sentencia.
La penalidad máxima para este delito, de acuerdo con lo que estipula el artículo 102 de la Ley de Justicia para Adolescentes Infractores de Chihuahua, capítulo Medidas sancionadoras privativas de libertad
, señala hasta 15 años de cárcel cuando tengan entre 16 años cumplidos y menos de dieciocho.