Morelia, Mich.

Unos 3 mil docentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) afiliados a sindicatos de educación media superior marcharon de Casa de Gobierno –residencia oficial del gobernador Silvano Aureoles Conejo– al centro histórico de esta capital para exigir el pago de 300 millones de pesos, repudiar la reforma educativa y ofrecer su apoyo a los padres de los normalistas desaparecidos en Ayotzinapa, Guerrero, en septiembre de 2014.

Entre los sindicatos participantes estuvieron los del Colegio de Bachilleres, del Colegio de Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep), del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Michoacán, del Instituto de Capacitación para el Trabajo de Michoacán y de la Universidad Tecnológica de Morelia, entre otros. Los inconformes reclamaron pagos rezagados a empleados eventuales y bonos a trabajadores agremiados a la CNTE.

Llegaron al palacio de gobierno después de las 13 horas y demandaron al gobierno estatal abatir el rezago en educación básica y media superior. Además, reiteraron que la lucha contra la reforma del sector seguirá porque en nada ayuda al sistema educativo y sólo reduce derechos.