Con una destacada presencia, en cuanto a calidad y cantidad, la cinematografía nacional llega a la capital alemana con ocho películas para participar en la edición 66 del Festival Internacional de Cine de Berlín, que se inauguró ayer y se prolongará al 21 de febrero.

En entrevista con La Jornada, Jorge Sánchez Sosa, titular del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), mencionó que es importante que el cine mexicano asista a encuentros internacionales porque pone en diferentes vitrinas de exhibición las películas nacionales terminadas, pasando por la formación de talentos, la búsqueda de financiamiento y de apoyo para nuevas producciones domésticas.

Sánchez Sosa recalcó: “Hace un año el documental Eco de la montaña, de Nicolás Echevarría, fue seleccionada para inaugurar la nueva sección, NATIVe; el año pasado 600 millas, de Gabriel Ripstein, ganó como mejor opera prima, y hace dos años ganó, en la misma categoría, Güeros, de Alonso Ruizpalacios. Desde hace tres años la cinematografía mexicana ha estado figurando básicamente en el Berlinale Talent Campus, el Coproduction Market y el Work Cinema Fund, que promueve la producción fílmica en países en desarrollo; fue apoyado Te prometo anarquía, de Julio Hernández Cordón, a quien a partir de ese acuerdo se le destinó un recurso económico adicional sólo por haber sido seleccionada por el dicho fondo”.

Sánchez continuó: En el caso del Berlinale Talent Campus, en promedio han participado 14 jóvenes mexicanos, y el Imcine, por conducto de las secretarías de Cultura y de Relaciones Exteriores, apoyamos a los jóvenes cineastas que son seleccionados para participar.

En cuanto a la parte lucidora, el director del Imcine informó que en la competencia oficial por el Oso de Oro participa Soy Nero, coproducción entre México (Pimienta Films), Francia y Alemania –filmada casi en su totalidad en Mexicali–, del director anglo-iraní Rafi Pitts, que muestra la historia de un indocumentado mexicano.

En la sección Forum, dedicada a trabajos experimentales, se presentarán tres producciones nacionales: Maquinaria panamericana (México-Polonia), opera prima de Joaquín del Paso. Esta comedia negra narra la historia de los empleados de una fábrica que, tras la repentina muerte del dueño se enfrentan a la quiebra de la empresa.

Asimismo, se exhibirá Historia de dos que soñaron, de Andrea Bussmann y Nicolás Pereda. En esta coproducción México-Canadá, se narra la historia de una familia asentada en Toronto que busca su residencia. La tercera es Tempestad, documental de Tatiana Huezo, que retrata la realidad de un país controlado por el crimen organizado. El filme es un viaje emocional en el que conviven la pérdida y el dolor con el amor y la resistencia.

Jorge Sánchez agregó que hay otras participaciones como el cortometraje que dirigió Rubén Gámez en 1976, Los murmullos, que se presenta fuera de competencia, “la cual nos da mucho gusto que se proyecte en el festival de Berlín. En este trabajo, Gámez retrata a modo de denuncia social la pobreza y falta de desarrollo de una comunidad de trabajadores del estado de México.

“Además, en la sección de Generation Kplus se proyectarán los documentales Aurelia y Pedro y Neiwa, dirigidos por alumnos del Departamento de Imagen y Sonido del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño, de Guadalajara. Es decir que estamos contentos con esta selección que va al festival de Berlín.”

Finalmente, Sánchez Sosa informó que participará en diferentes mesas de debate que se organizan en la Berlinale, como Meet the Docs, donde se analizará la situación del documental en México en términos de narrativa, enla cual participarán Tatiana Huezo y Adriana Trujillo.

El director del Imcine precisó que el instituto organiza Países en Foco, acto para informar de manera muy precisa los mecanismos de financiamiento y apoyo al cine en México, en el cual participa nuestro país, además de Canadá y Francia.