Presión sobre dos ruedas
Críticas por bajar multas
Conflicto de corazón azul
hora resulta que las organizaciones más allegadas a la Subsecretaría de Planeación de la Secretaría de Movilidad del gobierno de la ciudad, principalmente la conocida como Bicitekas, lanzó una crítica severa a Miguel Ángel Mancera por atreverse a rebajar el monto de las multas por transgredir las leyes de tránsito, aunque para los ciclistas –el grupo que ellos defienden– no exista sanción alguna a las faltas que cometen día con día y que ponen en peligro al peatón.
La protesta parece un ataque, tal vez sin sentido, al jefe de Gobierno, porque para las faltas que cometan los ciclistas, como decíamos arriba, no se imponen multas o cuando menos no hallamos ninguna en los cinco artículos –del 14 al 19– dedicados al transporte no motorizado del nuevo Reglamento de Tránsito.
Y entonces, la única explicación que podría parecer coherente es la de tratar de presionar a las autoridades, por ejemplo de la Secretaría de Movilidad, para que accedan a otorgar otro lugar dentro de su estructura a alguno de los miembros de la red que encabeza el Instituto para el Transporte y el Desarrollo, en la que también está incluido el grupo Bicitekas.
Recibimos una carta de respuesta a nuestra entrega pasada; nos la envía el director de ITDP para Latinoamérica, Bernardo Baranda, pareja sentimental de la señora Laura Ballesteros, subsecretaria de Planeación de la Secretaría de Movilidad, quien tuvo a bien imponer en una de las carteras más importantes de la subsecretaría a Karina Licea, hasta hace muy poco tiempo vocera de la compañía Uber y antes funcionaria, también de muy buen nivel, en la organización que dirige Bernardo Baranda, todos ellos amantes de las bicicletas, tanto que Karina Licea usa el nombre de karicleta.
Todos los datos que hemos dado son comprobables porque son públicos y desde luego es imposible negarlos. Si todo esto no plantea un conflicto de intereses para la subsecretaria Ballesteros, quien tal vez por amistad, y sólo por eso, llamó a Licea a hacerse cargo de la dirección del registro público de automóviles, debe tener tanta confianza en Licea, quien si bien no ha sido ratificada en el puesto, hace ya algunos días que da órdenes desde el despacho de esa instancia de la dependencia.
Pero el problema es del gobierno de la ciudad, porque está claro para todos que la señora Ballesteros fue militante del Partido Acción Nacional, y aunque dejó esa organización, los panistas la consideran de corazón azul, y si eso es cierto, este conflicto debería haber sido anticipado por quienes deben tener a Miguel Ángel Mancera bien informado de quiénes son sus colaboradores. Ni modo, así es la política.
De pasadita
No escuchamos, por ningún lado, las protestas a grito abierto de los defensores de los espacios públicos que fustigan a quienes ocupan las calles de la ciudad para condenar los actos de gobierno que los dañan. Este fin de semana, una porción importante de las principales calles estará cerrada a la circulación porque por ella transitará el principal mandatario del Estado Vaticano.
Desde luego que se extrañan las voces estridentes que atacan a quienes impiden el libre tránsito. Tanto silencio ensordece y nos obliga a preguntarnos: ¿Y ahora, por qué no?