Al término del tercer año de gobierno, el déficit financiero del sector público mexicano ascendió a 627 mil 423.7 millones de pesos, un desequilibrio mayor en 94 mil 550.5 millones respecto al observado en el segundo año de la actual administración y equivalente a un incremento anual de 17 por ciento.

De acuerdo con informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el hueco de 2015 en las finanzas del sector público, constituido básicamente por el gobierno federal y los organismos y empresas públicas, fue generado por un aumento de 281 mil 495 millones de pesos en los ingresos, el cual quedó a la zaga de un crecimiento de 363 mil 929 millones de pesos en el gasto neto pagado durante el año pasado.

Lo más sobresaliente en los ingresos fueron, por un lado, la elevación anual de 558 mil 612 millones de pesos en la recaudación tributaria; y por otro, el desplome de 266 mil 669 millones de pesos en los ingresos no tributarios obtenidos por el gobierno federal, sobre todo por las menores aportaciones fiscales de Petróleos Mexicanos (Pemex), que anularon 48 por ciento del avance en el pago de impuestos en 2015.