El proyecto que elaboró el Instituto Nacional Electoral (INE) para el proceso de elección de la Asamblea Constituyente provocó el rechazo de diputados de PAN y PRD, quienes acusaron el intento de aplicar la sobrerrepresentación que beneficia a los partidos satélites del PRI en materia de financiamiento”.

Santiago Torreblanca, Héctor Barrera, Santiago Taboada y Cecilia Romero, del PAN; y Daniel Ordóñez, del PRD, criticaron la técnica electoral utilizada por el INE porque el financiamiento público –dijeron– debe otorgarse en función de la votación obtenida por los partidos.

Los panistas apuntaron a desacreditar la propuesta de la autoridad electoral porque rompe con la equidad en la contienda, rompe con la voluntad ciudadana, e incluso con nuestro marco constitucional.

La argumentación de estos recayó en el terreno de la ley, pues en ella se establece que el financiamiento para campañas electorales corresponderá a 30 por ciento del total ordinario que deben recibir los partidos políticos.

Es decir, tal financiamiento ordinario se distribuye en proporción de 70-30; 30 por ciento en partes iguales a todos los partidos políticos y 70 por ciento con base en el porcentaje de la votación obtenida en la última elección.

Santiago Torreblanca expuso que el INE pretendía (hasta ayer) que el financiamiento de los partidos políticos fuese exactamente igual. Circunstancia que implica la división de 30 por ciento del financiamiento ordinario, estableciendo que cada partido, sin importar el porcentaje de votación, recibiría la misma cantidad, aproximadamente 10 millones de pesos.