Caracas.

La Asamblea Nacional de Venezuela, con mayoría opositora, debatirá en los siguientes ocho días el decreto de emergencia económica que firmó el gobierno del presidente Nicolás Maduro la víspera, si bien su aprobación pende de un frágil consenso.

El decreto fue entregado la noche del viernes por el mandatario al jefe de la Asamblea (parlamento unicameral), el opositor Henry Ramos Allup, durante la presentación de su informe de gobierno de 2015.

Ramos aseveró que los diputados discutirán el decreto, que al final será sometido a votación en la Asamblea, con 109 legisladores opositores y 54 del oficialismo, pero que tendrán que pedir información al gobierno, e hizo alusión al presidente del banco central, Nelson Merentes.

Cuente, presidente, que si usted busca diálogo, aquí (en la Asamblea) tendrá. Nadie tiene que dejar sus posiciones ideológicas si encontramos puntos de coincidencia para resolver esta crisis, para salir de este atolladero. Nosotros no somos quienes vamos a negar la posibilidad de solucionarla. Vamos a estudiar el decreto, subrayó.

Ramos condicionó el diálogo a la obtención de resultados. Si hubiera rectificación e intención de diálogo sincero, pues claro que estamos dispuestos, apuntó.

El gobernador del estado de Miranda, el opositor Henrique Capriles, afirmó que dicho decreto es una habilitante disfrazada, al referirse a los poderes especiales que otorgó a Maduro la anterior legislatura, de mayoría oficialista, para que pudiera legislar por decreto.

En este contexto, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana reafirmó su fidelidad al gobierno venezolano, en respuesta a las declaraciones del presidente de la Asamblea Nacional, quien la víspera se pronunció en contra de inclinaciones políticas en el seno militar.