Debido al alto volumen de importación de leche en polvo, sueros y otros derivados, este año abandonaron la actividad 5 mil 500 establos, y los pequeños y medianos productores que subsisten enfrentan caídas en el precio, así como constante incertidumbre en la compra de su producción por las grandes empresas y Liconsa, dijo Álvaro González Muñoz, presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, quien responsabilizó a la Secretaría de Economía de la caída gradual del precio (en 44 centavos), debido a las importaciones que superaron 100 mil toneladas de queso, equivalentes a mil millones de litros anuales.