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Ya no suben a La bestia; caminan más de 400 kilómetros: Solalinde

Exhiben en fotos viacrucis de centroamericanos
Foto
La muestra 446 km se expone en la galería El Ocote, en Juchitán. La integran 20 fotografías en blanco y negro que reflejan el recorrido de los migrantes centroamericanos a su paso por los estados de Oaxaca y ChiapasFoto Diana Manzo
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 26 de diciembre de 2015, p. 24

El fotógrafo de prensa, Jacciel Morales, inauguró la exposición 446 km, de más de 20 fotografías en blanco y negro que muestran la vida de los centroamericanos a su paso por el sur de México, en su viaje a Estados Unidos.

446km es la distancia que recorren los migrantes desde que ingresan a México hasta Ciudad Ixtepec, Oaxaca. Relata paso a paso a través de rostros y rastros la situación migratoria de los centroamericanos. La muestra se realiza en el contexto del Día Internacional del Migrante, que se celebró el pasado 18 de diciembre.

En compañía del sacerdote Alejandro Solalinde Guerra –fundador del albergue Hermanos en el Camino de Ciudad Ixtepec– el comunicador inauguró la exposición en la galería El Ocote, un espacio independiente fundado en Juchitán por el suizo Heinz Schaub.

Antes de cortar el listón inaugural, Solalinde Guerra expresó el trabajo que ha hecho Jacciel, quien con su lente ha mostrado la ruta de La bestia, tren que hasta hace más de un año transportaba a cientos de centroamericanos.

“El migrante ahora ya no se monta en La bestia, ahora recorre más de 400 kilómetros a pie, sin importar lo que debe vivir; él camina por el hambre, por un sueño que es conquistar una nueva forma de vida y mejorar las condiciones de su familia, ese es un migrante. Jacciel lo ha mostrado muy bien, y estoy seguro que seguirá reflejando esa realidad mediante las fotografías”, expresó el sacerdote.

La exposición permanecerá en El Ocote hasta enero para dar a conocer que la migración no se ha detenido y se siguen violentando los derechos de los centroamericanos.

El istmeño Jacciel Morales lleva más de 10 años acompañando a los migrantes y con su lente refleja los rastros y rostros desde la madre que viaja con sus hijos, de los menores sin compañía, del padre que busca un trabajo y de la abuela que huye de la violencia de su país.