México continúa siendo uno de los países más peligrosos para ejercer el sacerdocio. Desde hace más de una década encabeza la lista de los lugares con mayor número de crímenes de odio contra sacerdotes, religiosos, agentes de pastoral, así como agravios a templos, indica el reporte 2015 sobre agresiones a clérigos denominado 25 años de sacerdocio en la línea de fuego, elaborado por el Centro Católico Multimedial (CCM).

El sacerdote Omar Sotelo Aguilar, director del CCM precisó que en lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto 11 sacerdotes han sido asesinados y dos están desaparecidos, y refirió que las entidades más riesgosas para el desempeño de esta actividad son Guerrero, Tamaulipas y estado de México.

Detalló que la cifra indica que la violencia en contra de clérigos ha aumentado si se compara con los tres primeros años del sexenio de Felipe Calderón.

El reporte indica que cotejando los números, el fenómeno de atentados en la administración actual ha crecido, si comparamos datos del gobierno pasado de Felipe Calderón. El hecho se traduce en que al tercer año (2006-2009), se tenía registro de nueve casos de religiosos asesinados: siete sacerdotes y dos seminaristas.