Dudoso, que 11 ganadores sean de capital mexicano: especialista
Lunes 21 de diciembre de 2015, p. 23
La modalidad en que se licitaron 25 campos en la tercera subasta de la ronda uno para la explotación de crudo y gas es la de contrato de licencia, figura que en términos financieros equivale a concesiones, aseguró Rocío Vargas Suárez, del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (Cisan) de la Universidad Nacional Autónoma de México y especialista en temas petroleros.
Explicó que la única diferencia es que en una concesión el traspaso del hidrocarburo al privado se realiza desde el subsuelo (ya que están prohibidas por la Constitución), pero en el caso de contratos de licencia la transferencia se efectúa desde el suelo, a boca de pozo. Aquí el concepto clave es la transmisión onerosa de hidrocarburos.
Por otro lado, afirmó que, pese a que se anuncia que en 11 licitaciones el capital es mexicano, surgen dudas porque en algunos casos el participante local tiene socios de otros países. Sobre todo son de Houston, Texas, como es el caso de las compañías ganadoras en los campos El Tajón y Moloacán.
El pasado 15 de diciembre, durante la tercera licitación de la ronda uno, la compañía mexicana Perseus SA de CV ganó el campo número 23, Tajón, ubicado en Tabasco, que tiene un volumen de 652 millones de barriles de aceite, con una propuesta de 60.88 por ciento de regalía adicional. El valor mínimo que pedía el gobierno para éste era de 5 por ciento.
En tanto, el área 14, Moloacán, de 46.3 kilómetros cuadrados y un volumen de 221.7 millones de barriles de aceite, fue ganado por la compañía holandesa Canamex Dutch BV, en consorcio con Perfolat de México SA de CV y American Oil Tools. Su propuesta fue de 85.69 por ciento de regalía adicional. El valor mínimo requerido por el gobierno federal era de 5 por ciento.
Vargas Suárez, quien se desempeñó como investigadora de tiempo completo en el Programa de Energéticos de El Colegio de México de 1984 a 1988 y de 1989 a la fecha es investigadora de tiempo completo en el Cisan, explicó que en México no se tiene experiencia con la explotación del gas shale, por lo que es dudoso que el origen de la compañía sea nacional, a menos que ésta funja como prestanombres.
La doctora en ingeniería energética de la UNAM dijo que en otros siete campos en los que se va a explotar gas (Benavides-Primavera, Ricos, Mareógrafo, Carretas, Duna, San Bernardo y Calibrador), es claro que corresponden a los proyectos del gas shale, ya que son parte del activo Burgos.
En el caso de las compañías ganadoras para explotar gas, el origen de la empresa aparece como Mexicano
y en algunos casos se señala con socios
.
Resaltó que en México no se tiene experiencia con la explotación del gas shale, por lo que es dudoso que el origen de la empresa sea nacional. Sin duda el origen del capital sería estadunidense, considerando que el proyecto geopolítico de Estados Unidos está centrado en la explotación de ese gas dentro y fuera de sus fronteras, y sería ejecutado por sus empresas.