En el balompié mexicano han aumentado el número de jugadores naturalizados por los intereses económicos de los clubes y de seguir esa tendencia llegará el momento en que cada equipo tenga 10 elementos de fuera, lo que sería un absurdo para nuestro futbol, señaló el ex federativo Rafael Lebrija.

El también ex directivo de Toluca y Chivas recordó que cuando fue presidente de la primera división de la Federación Mexicana de Futbol se iba a reducir de cinco a cuatro extranjeros por equipo, pero al torneo siguiente se elevó de cinco a seis.

Los promotores ofrecen a los jugadores, principalmente de Sudamérica, a precios altísimos. Entonces, para que cada torneo sigan trayendo más, buscan la naturalización de otros, pero sólo por sus intereses, señaló.

Lebrija recordó que en su etapa como dirigente del Toluca yo trataba directamente con los jugadores, los iba a ver jugar, hablaba con sus familiares, analizaba la posición, edad, precio, préstamo, etcétera. Yo no los traía si no los veía jugar.

Agregó que en el futbol actual se sabe que algunos promotores manejan a ciertos clubes, eso siempre sucede y que por ello él como directivo escarlata siempre evitó a los intermediarios y realizaba directamente los fichajes.

El ex dirigente fue cauto en cuanto a la situación de los naturalizados, ya que tienen los mismos derechos que los nacidos en el país, aunque aclaró que su proliferación sí impide que los jóvenes tengan oportunidades en los equipos y después en la selección.

Lebrija, quien duró poco más de seis meses como presidente de las Chivas, habló de la contratación de Carlos Gullit Peña, que se estima fue entre 8 y 10 millones de dólares.

Eso es mucho dinero. Con 25 por ciento de ese monto mejorarían sus fuerzas básicas y volverían a ser base de la selección, como eran antes; hubieran tenido mejores resultados que firmar a un solo jugador. El problema es que para muchos equipos es más fácil contratar que trabajar con jóvenes. Muchos directivos no tienen idea de cómo manejar un equipo, señaló, aunque no quiso ahondar en los casos de sus ex equipos Chivas y Toluca.

Lebrija también se pronunció por el cambio de formato del balompié nacional y consideró que, para mejorarlo, es necesario regresar a las temporadas anuales.

Con los torneos largos hay más estabilidad para trabajar, pero si les gusta tanto podrían dejar la liguilla y el duelo por el título, con lo que seguiríamos teniendo finales emotivas como la del domingo pasado, concluyó.