El viernes próximo no aterrizará en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) el nuevo avión Boeing 787 Dreamliner que utilizará el presidente Enrique Peña Nieto los próximos tres años, debido a que las obras de remodelación del hangar presidencial aún no terminan.

Así lo confirmaron fuentes del AICM que fueron informadas por la Oficina de la Presidencia. Ello, pese a que los trabajos de construcción tienen un avance de más de 90 por ciento. El arribo de la aeronave podría ser el mes próximo.

Al efectuar un recorrido por dicho hangar, que se localiza a un costado de la Terminal 2, se observó que varios camiones sacan cascajo y algunos albañiles trabajan a marchas forzadas. Pintan y aplanan muros.

La entrada principal está cubierta de plástico negro y dos trabajadores remodelan el lugar. Algunos edificios y el estacionamiento aún están en obra, y en varios lugares hay material esparcido.

La construcción, etiquetada como proyecto de infraestructura del AICM, con clave 1409KDN0001, contempla la ampliación, modernización y edificación de áreas dedicadas al mantenimiento y resguardo de aeronaves. De igual forma, almacenes, estacionamiento, áreas de adiestramiento y acondicionamiento, edificios administrativos y vialidades, en un espacio de 60 mil metros cuadrados.

Las obras son por adjudicación directa y se entregaron a la constructora Teya, filial de Grupo Higa. Según el proyecto de inversión, autorizado por el consejo de administración de la terminal aérea, los trabajos concluirían en noviembre pasado.

La Jornada publicó hace días que para la remodelación del hangar presidencial del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se destinó este año 348.5 millones de pesos, para sumar un total de 977.7 millones, los cuales fueron gastados en dicha obra en los pasados tres años.