El titular de la Secretaría de Desarrollo Social, José Antonio Meade Kuribreña, anunció un relanzamiento de la Cruzada Nacional contra el Hambre, uno de los cuatro rubros en que trabajará la dependencia a partir del año próximo.

Dicha estrategia es un mecanismo útil de coordinación interinstitucional, focalizada en atender a personas en pobreza extrema, con carencia alimentaria, y ha dado buenos resultados, pero se requiere fortalecer y que siga siendo un instrumento de la política pública del gobierno federal, dijo en conferencia de prensa.

Explicó que los otros tres aspectos en que se trabajará son la construcción de un entorno lo más adecuado posible, desde la perspectiva de la Sedesol, de ingresos y de precios, en coordinación con estados y municipios, así como a escala interinstitucional en la atención a beneficiarios. La anterior titular de la Sedesol, Rosario Robles, presentó la cruzada como la principal estrategia para atacar el hambre durante los dos años y medio que estuvo al frente de la dependencia.

Meade Kuribreña enfatizó que el enfoque de coordinación interinstitucional de la cruzada ha sido valioso, ha dado buenos resultados y podemos aprovecharlo, incluso de mejor manera, para fortalecerlo hacia adelante.

Refirió que estados como Guerrero, Chiapas y Oaxaca, con los índices más altos de pobreza, aún son un reto, en particular en la generación de empleo. Recordó que en el cambio del programa Oportunidades a Prospera, que se realizó el año pasado, hubo énfasis en la inclusión laboral y financiera.

Dijo que se ha desplegado una estrategia de diálogo amplio con el sector empresarial, ya que un elemento central para atacar la pobreza es la generación de empleos formales, que den acceso a la seguridad social, y que haya inversiones en aquellos sectores y para aquellos bienes que son importantes en el combate a la pobreza.

Sostuvo que queremos generar condiciones de mejor abasto y de mejores precios, reducir barreras para la educación, la salud, la seguridad social, la vivienda y servicios. En términos generales, dijo, una política que fortalezca el ingreso y una mejora en los precios beneficiará más a los pobres. Aunque no se pronunció acerca del incremento marginal del salario mínimo, comentó que se debe tener un entorno que ayude a que se generen mejores espacios de ingresos.

Tras el aumento de 2 millones de pobres en el periodo 2013-2014 que dio a conocer en julio pasado el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), con lo cual suman 55.3 millones de mexicanos en esa condición, se le preguntó qué hará la Sedesol para evitar que esta tendencia siga, ya que a fin de 2016 se levantará la Encuesta Nacional de Ingreso Gasto de los Hogares, en la cual se basa esa medición.

Meade Kuribreña respondió que en un fenómeno tan complicado como el de la pobreza, donde coexisten diferentes realidades y diferentes rostros, la evaluación permitirá identificar avances y retos. La ventaja de la medición es que recoge diferentes variables, en cada una de las cuáles se evaluará si hay avances o no, sin calificar a la globalidad de la política pública.