Ante senadores, la subsecretaria de Comunicaciones y Transportes (SCT), Yuriria Mascott, defendió el Acuerdo sobre Transporte Aéreo que firmarán próximamente el gobierno mexicano y el de Estados Unidos, mejor conocido como de cielos abiertos, que el Senado debe ­ratificar.

Durante una reunión de trabajo con la comisión de Relaciones Exteriores del Senado, que preside la panista, Gabriela Cuevas, la funcionaria federal sostuvo que con el convenio se alentará la mejora de los servicios aéreos, al fomentar la apertura de más rutas, más frecuencias y, por tanto, mejores precios.

Además, insistió, promueve el desarrollo regional con la creación de nuevas rutas para atender mercados muy específicos. Su entrada en vigor apoyará nuevos esquemas de comercio intensivo en el uso del transporte aéreo, como es el comercio electrónico y fomentará la utilización de la vía aérea para carga y distancia en los que resulte más eficiente.

En la reunión, la senadora Marcela Guerra, del PRI, presidenta de la comisión de Relaciones Exteriores América del Norte, preguntó a la subsecretaria por qué se prohíben convenios para que Aeroméxico se pueda conectar o asociar con otras grandes empresas de aviación.

Yuriria Mascott respondió: Estamos totalmente de acuerdo que las alianzas en la aviación son benéficas; sin embargo, también estamos totalmente de acuerdo en que las alianzas deben ser revisadas por sus propios méritos. Si la alianza otorga competitividad, si permite que puedan entrar más rutas, más frecuencias y si ésta es benéfica, lo dirán las autoridades al ­otorgarla.

Pero, Estados Unidos “ha sido muy claro. Ha dicho: ‘yo puedo autorizar (la alianza Delta y Aeroméxico) una vez que el Senado, en su caso, ratifique este convenio. Si es ratificado puedo pronunciarme sobre la alianza’”.

El convenio, insistió la funcionaria, no prohíbe las alianzas; al contrario, se dio el marco para que éstas se pudiesen dar. No las condiciona.