Caracas.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció este miércoles una revisión integral de las relaciones con Estados Unidos luego de que nuevas filtraciones revelaron que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) espía a la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), y su gobierno presentó una enérgica protesta a Washington.

Estados Unidos dijo que responderá por los canales diplomáticos a las denuncias de espionaje que hizo Venezuela, y señaló que regularmente revisa la política sobre vigilancia electrónica, pero no vamos a discutir detalles públicamente sobre supuestas actividades de inteligencia, de acuerdo con el vocero del Departamento de Estado, John Kirby.

Al reconocer implícitamente las acciones de espionaje, Kirby descartó que la vigilancia electrónica a altos funcionarios de PDVSA haya sido motivada por la posibilidad de obtener ventajas económicas, porque el presidente Barack Obama ha sido muy claro al respecto. Además, añadió, no tenemos la intención ni el interés de desestabilizar al gobierno de Venezuela.

El jefe de Estado venezolano ordenó el inicio de una investigación, a fin de obtener detalles sobre un documento desclasificado de la NSA proporcionado por el ex contratista de esa agencia Edward Snowden, dado a conocer el miércoles por la multiestatal Telesur, así como por la revista electrónica The Intercept.

El texto, fechado en marzo de 2011 refiere que la NSA, en conjunto con la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y la embajada estadunidense en Caracas, espió las comunicaciones internas de PDVSA y los perfiles de más de 10 mil empleados.

La lista de perfiles espiados incluye a la directiva de la estatal, entre los que destaca el ex presidente de PDVSA (2004-2014) y actual embajador de Venezuela en la Organización de Naciones Unidas (ONU), Rafael Ramírez. También fue rastreada la vida personal y laboral del ex director de exploración y producción durante la gestión de Ramírez, Luis Vierma.

Esos documentos han revelado que Estados Unidos, sus agencias de inteligencia y la embajada de Washington en Caracas estuvieron espiando durante 10 años la vida privada de 10 mil trabajadores de la industria petrolera, sostuvo Maduro.

Consideró que desde la nacionalización de PDVSA en 2001, empresa con el reservorio de crudo más grande del planeta, la intención de Washington ha sido sabotear la industria. Además, Venezuela le reclamó a Estados Unidos que revele la identidad de los agentes involucrados en el espionaje.

El ex presidente de Uruguay y actual senador José Mujica rompió relaciones con su ex canciller Luis Almagro, actual secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), por la carta en la que éste cuestionó el proceso electoral de Venezuela. Lamento el rumbo por el que enfilaste y lo sé irreversible, por eso ahora formalmente te digo adiós y me despido, le dice en una misiva.

En tanto, el gobierno de Chile dijo que acatará una orden de la Suprema Corte de solicitar a la OEA que abogue por la salud de opositores venezolanos presos.