Lunes 16 de noviembre de 2015, p. 38
Buenos Aires.
El candidato del oficialista del Frente para la Victoria (FpV), Daniel Scioli, y el opositor Mauricio Macri, de la alianza Cambiemos, sostuvieron la noche de este domingo un debate, a una semana de la segunda vuelta presidencial en Argentina, cada uno mantuvo sus posiciones políticas pero con respuestas salpicadas de fuertes acusaciones y sin ir a fondo en las propuestas.
El debate era esperado por millones de argentinos, especialmente en el sector de los indecisos para la segunda vuelta electoral del próximo 22 de noviembre. El debate de 75 minutos, que se desarrolló en el aula magna de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, tuvo un rating de más de 50 puntos, teniendo en cuenta los canales abiertos y de cable, según reportes.
Scioli demostró mucho mayor firmeza política y mantuvo sus propuestas frente a un Macri sorprendentemente nervioso que en ningún momento logró mantener un discurso político. Incluso tuvo algunos momentos agresivos con su contendiente.
Los candidatos respondieron preguntas sobre desarrollo económico y humano, educación e infancia, seguridad y derechos humanos, y fortalecimiento democrático, en un debate inédito en el que Scioli se centró en difundir las propuestas que anunció en la campaña electoral y además de explicar el alcance de esas propuestas advirtió sobre las políticas neoliberales, el tema de la devaluación y otros anuncios de políticos y economistas que forman los equipos de Macri.
El opositor pierde la paciencia
El opositor evitó toda respuesta y mantuvo su estrategia de campaña con un discurso en el que no profundizó ni dio mayores explicaciones sobre sus planes.
Sorprendió también cuando Macri perdió la paciencia y acusó de mentiroso a Scioli, y de mala gente
al gobierno actual. Trató de explicar, pero sin conceptos, que sus planes no consideraban una vuelta atrás, a pesar de que sus colaboradores prometieron devaluación, eliminar subsidios y revisar la nacionalización de empresas estratégicas privatizadas en los años 90.
El candidato opositor trató de desacreditar a su oponente, lo que jugó en su contra. Macri había sido declarado ganador del debate por una serie de agencias de noticias europeas mucho antes de que éste se realizara, lo que demostró que ya estaba decidido por la prensa opositora local y mundial dar un triunfo que no fue.
“En realidad Scioli lo instó a abrir su verdadera propuesta al público, pero no lo hizo en ningún momento, por lo que algunos observadores políticos se inclinaron en favor del candidato oficialista como el ganador del debate.
La opinión continúa dividida por la idea de que el debate estuvo bajo control de Argentina Debate de la ONG Cippec (Centro de Implementación para políticas públicas para la Equidad y el Crecimiento), que es una especie de grupo de pensante local
y parte del sistema de fundaciones extranjeras aquí.
Por supuesto, muy promovida por la oposición mediática, que prácticamente maneja los medios masivos de comunicación más importantes del país.