Esta semana la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) dejó en claro que por instrucciones del Vaticano no se darán a conocer los lugares que visitará el papa Francisco durante su estancia en México a fin de no generar falsas expectativas, porque será el pontífice quien decidirá y hará el anuncio oficial de su agenda.

No obstante para algunos jerarcas existen certezas en cuanto a ciertos lugares. El cardenal Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia, aseguró al semanario Desde la Fe, que edita la arquidiócesis de México, que el pontífice quiere ir a su arquidiócesis.

“El papa Francisco personalmente me dijo: ‘quiero ir a Morelia’, y eso me da mucha confianza de que se realizará este sueño, y por primera vez, el sucesor del apóstol Pedro pisará tierras michoacanas, lo que es una bendición, pero también una gran responsabilidad.”

Indicó que en Morelia el Papa podría estar frente a páginas importantes de la historia de México, relacionadas con el proceso de Independencia: Tanto Hidalgo como Morelos fueron nicolaítas, es decir, estuvieron en el colegio de San Nicolás, cuya fundación inspiró Vasco de Quiroga. Es bueno que el Papa conozca nuestra historia.

Por su parte, Rodrigo Aguilar Martínez, obispo de Tehuacán, refirió que lo que sabemos es que tiene muy en cuenta llegar a la Basílica del Tepeyac y luego a otros lugares que no hayan sido visitados por los papas anteriores.

Destacó que anhelamos que sea una experiencia significativa la permanencia del pontífice en el país. Ya el pueblo mexicano sabe lo que es la visita de un pontífice: cinco veces recibimos al papa Juan Pablo II, ahora santo, y una vez a Benedicto XVI. Ahora recibiremos al papa Francisco. Será en febrero, pero no se han definido totalmente los días y lugares de su visita. Esperaremos a que el Papa nos lo diga posteriormente.

Subrayó que por lo pronto vayamos preparando la mente, el corazón y la posibilidad de acercarnos físicamente a alguno de los lugares que luego se anuncie y hagamos oración por el Papa, como él mismo lo pide reiteradamente. Ya está grande de edad y los viajes le cansan mucho; pero no rehúye hacerlos. También llamó a escucharlo atentamente y con disponibilidad a comprometernos en lo que nos diga, para bien nuestro, no sólo de manera personal o familiar, sino para bien de nuestra patria.