La Habana.

La selección de Cuba derrotó 1-0 a Santos Laguna, actual campeón del futbol mexicano, con gol de Alexei Zuaznábar al minuto 83 del histórico partido.

El apodado Loco rompió el cero en el marcador para dar al anfitrión una victoria que se consideraba imposible, pese a las ausencias verdiblancas.

Los isleños acaparaban el balón, pero parecían incapaces de anotar por ejecuciones torpes, por méritos del rival o por miopía arbitral. Un juez de línea anuló un gol de Maykel Reyes por fuera de juego inexistente.

Cuba, comandada por Raúl González Triana, dominó la primera mitad, se plantó bien, creó peligro y cerró la amenaza lagunera contra el arco de Sandy Sánchez, quien atajó un disparo bien dirigido de Alonso Escoboza tras un desmarque de Javier Orozco.

El equipo caribeño mostró mucha ilusión, jugó con intensidad, segura. Tendría que verlos desempeñarse en otras circunstancias para evaluarlos, pero debo felicitarlos por su actitud, declaró el español Pako Ayestarán, técnico de Santos Laguna.

El criterio de quien fuera mano derecha del entrenador madridista Rafa Benítez fue secundado por el capitán lagunero, Carlos Izquierdo, quien consideró extraordinaria la experiencia de integrar el primer club mexicano que juega en Cuba desde 1947.

A nadie le gusta perder, pero siempre podemos rescatar las buenas experiencias, dijo el jugador, quien reconoció que sus compañeros hicieron una mejor lectura del encuentro en la segunda mitad, cuando los isleños perdieron ímpetu.

Aún así, Santos Laguna demostró en La Habana por qué pasó de ser el campeón de México a coquetear con el descenso: tras parecer mero espectador en la primera mitad, salió del letargo en la segunda, pero le falló la puntería.

La afición local –poco acostumbrada a los goles, las victorias y los cánticos futboleros– coreó el tradicional ¡Cuba!¡Cuba! para premiar a los vencedores, que sacaron un resultado que puso a soñar a más de uno.