Fumarla induce aparición de crisis en padecimientos siquiátricos: Óscar Próspero
abre camino a legalización
Domingo 8 de noviembre de 2015, p. 35
Aunque la reciente aprobación por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de un amparo que permite a cuatro personas el uso de la mariguana con fines recreativos no significa la legalización de esta sustancia, Óscar Próspero García, investigador del Laboratorio de Cannabinoides de la UNAM, considera que la medida sí abrió el camino y que por tanto aumentará el consumo de esa droga.
Quienes nos opusimos a que se permita su uso recreativo lo hicimos hasta que se pudo; ahora tenemos que ver cómo nos prepararemos los médicos para atender a los que usen la planta
, dijo a este diario.
El cirujano, maestro en sicobiología por la Facultad de Psicología y doctor en neurociencias, aseveró que no recomienda el uso de la mariguana, pero consideró que quienes decidan emplearla deben contar con información sobre sus efectos.
Indicó que aunque el uso de la cannabis no crea trastornos siquiátricos como depresión, ansiedad o sicosis, en quienes los padecen sí facilita la aparición de crisis. Agregó que no se ha demostrado que fumarla cause daños en el organismo; sin embargo, sí se han observado cambios en el cerebro.
Subrayó que quienes se inician el consumo de mariguana antes de los 17 años pueden presentar –aún durante la edad adulta– alteraciones en la atención y en otras funciones cerebrales, como la capacidad para razonar, planear, tomar decisiones y generar lenguaje.
El investigador adscrito al Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina señaló que estas consecuencias no se presentan en las personas que han fumado ocasionalmente mariguana, sino en aquellos que se vuelven dependientes.
De acuerdo con estudios que se han realizado sobre la mariguana, la molécula responsable de los efectos de la droga es delta-9-tetrahidrocannabinol, que actúa de manera similar a los endocanabinoides, sustancias que el cuerpo produce de manera natural y que están asociadas al placer; activan los sistemas responsables de las sensaciones placenteras como la risa o los orgasmos. Lo mismo hace la mariguana; sin embargo, puede sobreestimular al sistema y causar dependencia.
Para el académico, es necesario que se permita la investigación sobre la mariguana y sus efectos, con el fin de que los médicos cuenten con conocimientos para tratar a los usuarios.