Sábado 7 de noviembre de 2015, p. 14
El gobierno de México expresó ayer su enérgico rechazo a la decisión del Departamento de Justicia de Estados Unidos de no presentar cargos penales contra los agentes responsables de la muerte de Anastasio Hernández Rojas, quien falleció como resultado del uso excesivo de la fuerza el 28 de mayo de 2010, en las inmediaciones del puerto de entrada de San Ysidro, California. En un comunicado, Relaciones Exteriores dijo que tal determinación se contrapone al espíritu de colaboración impulsado por los gobiernos de ambos países, y genera la percepción de que las acciones indebidas de los agentes de la ley quedan impunes. Resaltó que esta decisión se toma a más de cinco años de los hechos en los que el connacional fue privado de la vida por agentes de la Patrulla Fronteriza, quienes le aplicaron choques eléctricos y lo golpearon, no obstante que estaba en el suelo, sometido y desarmado, y no representaba un peligro para los más de ocho agentes que se encontraban en el lugar.