Una experta en redes sociales también fue arrestada, pero la liberaron por cooperar
Lucio Ángel Vallejo es acusado de sustraer
información de la computadora de un auditor externo
Ambos sospechosos pertenecen al Opus Dei, corriente conservadora que se desvinculó de los hechos
Martes 3 de noviembre de 2015, p. 18
Roma.
Dos miembros de una comisión creada por el papa Francisco para estudiar las reformas de la Iglesia –el sacerdote español Lucio Ángel Vallejo Balda, secretario de la Prefectura para asuntos económicos, y Francesca Chaouqui, experta en comunicación y redes sociales, quien fue consultora para la reforma económica de la Santa Sede– fueron arrestados por sustracción de documentos reservados
y filtrados a medios de comunicación, informó el Vaticano.
La organización católica Opus Dei manifestó su sorpresa y dolor
por la detención de Vallejo Balda, miembro de esa corriente conservadora, y se desvinculó del caso al asegurar que no dispone de información sobre el tema
.
Vallejo Balda fue el secretario de la comisión creada en 2013 por el papa Francisco para asesorar sobre las reformas financieras y económicas en la curia romana, que fue disuelta. De hecho, el año pasado el Papa evitó recurrir a él para ocupar el puesto de secretario de la nueva Secretaría de Economía.
Este fin de semana, el sacerdote de 54 años fue arrestado para ser interrogado con base en las investigaciones de la guardia suiza sobre el robo y revelación de información y documentos
, explicó el Vaticano. Pero Chaouqui, de 33 años, de madre italiana y padre marroquí, también cercana al Opus Dei, fue puesta en libertad este lunes gracias a su colaboración con las autoridades.
Estos actos constituyen un delito según la ley IX del Estado Vaticano del 13 de julio de 2013
, promulgada en los primeros meses del pontificado del papa Francisco, señaló el documento.
El caso se trata de filtraciones sobre las cuentas del Vaticano y de personas designadas por el Papa para reformar las finanzas.
Según denuncias hechas por la prensa italiana, fueron robados datos importantes de la computadora de Libero Milone, auditor externo, a quien el Vaticano pidió controlar sus finanzas en el contexto de las reformas impulsadas por el pontífice argentino.
Milone, designado por Francisco en junio pasado, presentó el viernes pasado una denuncia por violación de datos informáticos, indicó el diario italiano Il Corriere della Sera, el cual sostiene que fueron robados documentos sobre las revisiones contables o sobre la reorganización en curso de los dicasterios (ministerios vaticanos)
.
Los arrestos ocurren antes de que esta semana se publiquen dos libros que podrían estar basados en el material filtrado y que arrojan luz sobre supuestas maquinaciones en contra del Papa.
Según el Vaticano, esos libros son el fruto de una grave ruptura de la confianza acordada con el Papa
y se está considerando adoptar medidas legales contra los autores.
Dichas publicaciones no contribuyen a establecer claridad y verdad, sino más bien a generar confusión e interpretaciones parciales y tendenciosas
, advirtió el Vaticano. Agregó: debemos evitar el error de pensar que ésta podría ser una forma de apoyar la misión del Papa
.
Uno de los autores, el periodista italiano Gianluigi Nuzzi, publicó en 2012 otro libro basado en filtraciones y en documentos robados a Benedicto XVI por su mayordomo Paolo Gabriele, quien fue sentenciado a 18 meses de prisión por robo y posteriormente perdonado.
El anterior libro de Nuzzi denunciaba favoritismos, luchas internas en el seno de la curia, negocios opacos del Banco Vaticano, hablaba de la salud del papa alemán y de un supuesto complot de asesinato.
Se cree que aquel escándalo, conocido como Vatileaks, podría haber precipitado la renuncia de Benedicto XVI en 2013.
El libro que presentará este miércoles Nuzzi, titulado Mercaderes en el templo, habla de un increíble despilfarro de la cúpula eclesiástica
. Ese mismo día también será presentado otro libro titulado Avaricia, sobre temas similares, del periodista Emiliano Fittipaldi.
Estas nuevas filtraciones podrían avivar las especulaciones sobre supuestas intrigas en el seno de la Iglesia católica contra las reformas pastorales y administrativas que impulsa el pontífice contra las alas más conservadoras.
La organización católica Opus Dei manifestó su sorpresa y dolor
por la detención de Vallejo Balda, miembro de la cúpula de este grupo.
Si se demuestra que la acusación es cierta, sería particularmente doloroso por el daño hecho a la Iglesia
, aseguró el comunicado de la organización conservadora fundada en 1928.
La revista italiana L’Espresso comentó que Vallejo Balda fue uno de los organizadores del lujoso banquete dado en mayo de 2014 en honor de la canonización de los papas Juan Pablo II y Juan XXIII, en una de las terrazas con vista a la plaza de San Pedro, lo que irritó al papa Francisco. Un acontecimiento con que traicionó sus principios de austeridad.