Los fundadores de Alta Grupo, Salvador Abascal y Luis López Panadero, reconocieron ante decenas de personas que han invertido en sus tres negocios –teléfonos públicos de monedas, la cadena de tiendas de conveniencia Mambo y una sociedad financiera popular (Sofipo)– que carecen de recursos para devolverles su dinero y ofrecieron como solución capitalizarse para obtener una recuperación, pero dentro de cinco años.

En reuniones realizadas ayer con algunos de los mil 800 inversionistas afectados por Alta Grupo, quienes no han recibido el pago de intereses desde febrero de este año, Abascal y López Panadero informaron que el corporativo tiene un adeudo de mil 900 millones de pesos, el cual justificaron por pérdidas que sufrió la empresa a raíz de la reforma en telecomunicaciones que hizo menos rentable su rama telefónica, al tiempo que les presentaron un plan alternativo para recuperar su capital mediante la probable alianza con otra Sofipo.

Unos 200 inversionistas fueron recibidos en tres bloques a lo largo del día (a las 8, 12 y 16 horas) en las oficinas de Alta Grupo y los directivos les expusieron que contrataron a Arseny Lepiavka, fundador y director de Zimma Corporate Finance, firma que se promociona como líder en venta de empresas, pero que les presentaron como experta en finanzas.

Lepiavka, según los inversionistas, presentó una proyección de recuperación de capital a cinco años, es decir hasta 2020, siempre y cuando Alta Grupo se fusione con otra Sofipo más grande para capitalizar su deuda, la cual sería tentativamente Financiera Mexicana para el Desarrollo Rural (Finamigo) aunque no se han concretado negociaciones al respecto, según los entrevistados, quienes pidieron el anonimato.

Quieren buscar un financiamiento dando en garantía a la financiera que supuestamente es la que aparentemente no ha tenido problemas de desempeño, pero por la cual admitieron que la semana pasada la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) les impuso tres multas y en todo el año han tenido que desembolsar 4 millones de pesos, comentaron.

Los directivos también descartaron la posibilidad de contar con un gran inversionista, como semanas atrás lo informaron por escrito a los afectados, pues mencionaron que Gustavo Villagrán, quien llegó a interesarse en capitalizar Mexicana de Aviación, se echó para atrás en apoyar a Alta Grupo con un crédito de 20 millones de dólares, así que de plano Abascal y López Panadero puntualizaron a los afectados que no había, no habrá, ni existirá otro inversionista.