Viernes 23 de octubre de 2015, p. 41
Entre 12 mil y 15 mil personas en México viven con esclerosis múltiple. La mayoría de los casos de esta enfermedad, que daña el sistema nervioso central, son personas que tienen de 20 a 40 años de edad y el reto más grande que enfrentan es obtener la atención médica integral, incluidos los medicamentos de reciente generación, los cuales ofrecen frenar la progresión de la enfermedad, señalaron especialistas de la Academia Mexicana de Neurología (AMN).
La esclerosis múltiple es un padecimiento autoinmune, es decir, el organismo se ataca a sí mismo y destruye la mielina, la cual es una capa protectora que asegura la buena comunicación entre neuronas.
Conforme avanza la enfermedad, según la zona del cerebro que resulte afectada por la desmielinización, los pacientes pierden capacidad físicas, principalmente la movilidad.
En conferencia de prensa, la neuróloga Irene Treviño explicó que una de las principales consecuencias de la esclerosis múltiple es la pérdida del volumen del cerebro y la progresión del mal ocasiona que seis años después del diagnóstico, en promedio, los pacientes requieren de asistencia para caminar, a los ocho se ven obligados a usar silla de ruedas y dos más tarde, ya no se pueden levantar.
De ahí la importancia de que los afectados obtengan un diagnóstico temprano y el acceso a las terapias más efectivas.
El neurólogo José Flores Rivera, integrante de la AMN, comentó que existe un trabajo conjunto entre institutos nacionales, autoridades, grupos académicos y científicos a fin de establecer protocolos de atención homogéneos en el país.