Durango, Dgo.

Integrantes del ejido Otilio Montaño tomaron este miércoles las instalaciones de la mina El Castillo, para exigir a la empresa minera Real del Oro –propiedad de la corporación canadiense Argonaut Gold– un pago atrasado de 43 millones de pesos, y aseguraron que no permitirán que el venero opere nuevamente en tanto no se les liquide el adeudo.

La mina de oro, ubicada en el municipio de San Juan del Río, estableció convenios con cuatro ejidos para operar. Los ejidatarios de Otilio Montaño descubrieron que a sus vecinos de las comunidades Atotonilco, San Agustín y San Lucas se les pagaba más que a ellos y se movilizaron para exigir una tarifa justa por la renta de sus tierras.Los inconformes indicaron que el pago debe ser retroactivo a 2008, por lo que haciendo cuentas, Real del Oro les debe unos 43 millones de pesos.

Gilberto Nodiz, ex comisario ejidal de Otilio Montaño, dio a conocer que en reuniones celebradas en días pasados con directivos de la minera, éstos aceptaron haber cometido una injusticia y accedieron a pagar 7 millones de pesos como retroactivo, cantidad que los ejidatarios rechazaron.

En respuesta, los campesinos llegaron ayer a las 7 de la mañana a la mina, se apoderaron de los accesos y no permitieron entrar a los trabajadores del turno matutino, sólo a los responsables de manejar explosivos, para que procedieran al cuidado, retiro y resguardo del lugar.

Miguel Ángel Olvera, secretario general de Gobierno, dijo que se han realizado 12 reuniones entre ejidatarios y directivos de la mina, hay buen ánimo, por eso nos sorprende este movimiento de los ejidatarios. Sostuvo que la minera ha pagado a los agricultores lo que estipula el contrato e incluso algunos años de renta por adelantado, aunque no dio a conocer montos.

No obstante, Olvera consideró que la demanda de los ejidatarios es justa, por lo que los empresarios deberán negociar con los campesinos. Vamos a buscar que los ejidatarios liberen la mina para reanudar las pláticas y lograr un buen acuerdo entre ambas partes, porque no sólo pierde la empresa minera, también los casi 600 trabajadores que laboran en la misma, dijo.