Solidaridad, Q. Roo.

Al inaugurar el Encuentro de Ministros de Agricultura de las Américas, el presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que ante el desafío mundial de incrementar la producción agrícola para satisfacer los crecientes requerimientos de la población, es necesario mejorar la productividad agrícola sin afectar el medio ambiente.

Si logramos democratizar la productividad no sólo potenciaremos el desarrollo regional, también habremos de reducir la pobreza y la desigualdad social, dijo el Presidente al subrayar la necesidad de diseñar políticas tanto para los grandes productores como para los agricultores medios, que redunden en un aumento en el cultivo de alimentos.

Ante los ministros de Agricultura de América Latina, el mandatario señaló que en las proyecciones de Naciones Unidas se tiene previsto que la población mundial en 2050 sea de 9 mil 700 millones de personas y se requerirá aumentar la producción de alimentos entre 70 y 100 por ciento.

Todo ello, en un entorno en el que se espera que solamente se añadirán 20 por ciento de nuevas tierras de producción, por lo que la única vía para aumentar el suministro de alimentos vendrá por la productividad en el campo.

Peña Nieto se refirió al caso mexicano, en el que si bien existen grandes productores con acceso a créditos y nuevas tecnologías, también hay productores medios cuya actividad en buena parte está destinada al autoconsumo. Dijo que la política para el sector se ha canalizado en esas dos dimensiones.

Explicó que mediante el programa Proagro productivo se ha pretendido enfrentar esta dualidad que existe en el sector, a efecto de incorporar a una gran cantidad de pequeños productores a recursos que les permitan acceder a innovaciones tecnológicas, obtener semillas mejoradas y fertilizantes que incrementen la productividad en sus parcelas.

Señaló que hasta el momento se ha incorporado a un millón 200 mil productores a los beneficios de estos programas, que les permiten obtener recursos económicos y tecnológicos para producir en mejores condiciones. El reto para el país es lograr que cada vez mayor número de productores puedan obtener esos beneficios para mejorar sus condiciones de producción.

En su oportunidad, el director general del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), Víctor Villalobos, aseguró que el desafío actual es que la satisfacción de las necesidades alimentarias en el presente, no ponga en riesgo la sustentabilidad del planeta a futuro, agotando recursos básicos, como el suelo y el agua.

Reconoció la necesidad de incrementar la productividad agrícola de cara al futuro, sin que esa situación impacte negativamente al medio ambiente, acrecentando los efectos del cambio climático. Para ello se debe buscar una visión incluyente de los diversos tipos de productores, que permita cerrar las brechas sociales en el sector, pero que permita incrementar la producción agrícola.

En su oportunidad, el secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, José Eduardo Calzada, aseguró que el mundo enfrenta desafíos a futuro ante el aumento de la población para que, desde ahora, se incremente la producción agrícola para evitar que se acentúen los problemas de pobreza, hambre y desnutrición.

Incrementar 70 por ciento la producción en 2050, situación que permita alimentar a 9 mil millones de personas que para entonces tendrá el mundo, es un desafío y una obligación moral. Es necesario hacerlo, dijo, sin comprometer la sustentabilidad del planeta, cultivando mejor, produciendo más y alimentando mejor a la población, finalizó.