Guadalajara.

Un error imperdonable de Raúl Dedos López y la actuación soberbia del portero Cristian Campestrini costaron a Chivas el empate a un gol ante el Puebla y con ello sumó su segundo partido sin ganar.

Los rojiblancos consiguieron ponerse en ventaja a la media hora del partido, con un disparo espectacular de Marco Fabián desde media distancia. Pero a punto de terminar el primer tiempo, Alberto Gutiérrez se metió al área y se llevó a dos defensas. El Dedos López le había quitado la pelota, pero en un alarde suicida la envió de taconcito, con tan mala fortuna que volvió a los pies de Gutiérrez para que la rematara al fondo del arco.

Después, Chivas la intentó por todos los medios, pero sin el empuje suficiente y chocando con las atajadas impecables de Campestrini.

Ambos equipos están bajo la presión de estar en situación comprometida en la tabla porcentual, mientras que en la general el rebaño llegó a 17 puntos y el de la franja a 20, metido en zona de clasificación.

Con el control de la pelota, Chivas comenzó a generar peligro ante el marco defendido por el argentino Campestrini, en una clara muestra de que no estaba dispuesto a que le faltaran al respeto en casa, así quería dejarlo en claro.

En el minuto 31 se puso en ventaja 1-0 con el tanto de Marco Fabián, a quien la zaga poblana cedió todo el espacio para que sacara disparo lejano que sorprendió a Campestrini que, pese a su lance, no pudo evitar el gol.

En lo que se esperaría un bajón del cuadro poblano ante la desventaja, sucedió todo lo contrario, pues apretó al frente y comenzó a inquietar al arquero Antonio Rodríguez, que hasta el momento se había mostrado impenetrable junto con su zaga.

El conjunto poblano, por su parte, apretó en la marca y trató de presionar la salida del rival, pero le costaba trabajo evitar que le llegara por las bandas, mientras que al ataque esperaba resolver con Luis Gabriel Rey o Matías Alustiza, sin muchos resultados.

Los dos equipos se conformaron con el empate y siguen con sus problemas de descenso y con la presión de tener que sumar en lo que resta del torneo para tener un Clausura 2016 más tranquilo.

Al final del encuentro, Dedos López expresó su pesar por haber entregado una pelota que costó el gol del empate poblano.

Es triste perder una ventaja por un error mío, dijo el jugador. Vi muy cerca (a Gutiérrez) de mí, quise hacer un taco y arruiné el trabajo del equipo.

Matías Almeyda reconoció que Chivas no estuvo a la altura de otros partidos, pero que en el futbol profesional no pueden estancarse en la frustración.

Dijo que no deben remarcar el error cometido por el Dedos, porque lo que se debe hacer es darle confianza, pues está seguro de que lo que vivió esta tarde le dejará una enseñanza.