Según encuesta del Banco de México, analistas redujeron perspectiva de avance del PIB
Caída en producción de Pemex y desempeño más débil de Estados Unidos, entre los riesgos
Sábado 3 de octubre de 2015, p. 20
La economía mexicana afronta un panorama de menor crecimiento y mayor depreciación cambiaria, mientras la inflación se mantendrá debajo del objetivo oficial, según una encuesta entre analistas del sector privado realizada por el Banco de México a finales de septiembre, cuyos resultados fueron dados a conocer este viernes.
El producto interno bruto (PIB) tendrá en 2015 repunte de 2.31 por ciento, según los analistas, cifra marginalmente menor a 2.34 por ciento previsto en la encuesta de agosto. Se trata de la decimosegunda revisión consecutiva en el pronóstico de crecimiento para este año.
La Secretaría de Hacienda mantiene como previsión para este año un crecimiento del PIB de entre 2 y 2.8 por ciento; y de entre 2.6 y 3.6 por ciento para 2016. En tanto, el Banco de México pronostica que la economía repuntará entre 1.7 y 2.5 por ciento en 2015 y entre 2.5 y 3.5 por ciento en 2016.
Con la tasa de crecimiento esperada, la economía generará 676 mil empleos formales este año, 3 mil más de los previstos en la encuesta de agosto.
Las expectativas de crecimiento del PIB en México han continuado deteriorándose. Esto se debe a que el balance de riesgos podría verse afectado por una menor producción por Petróleos Mexicanos y un desempeño económico en Estados Unidos más débil de lo esperado, lo cual se vería contrarrestado por un avance paulatino en el consumo interno mexicano
, comentó, respecto de la encuesta, Dolores Ramón Correa, analista de Ve por Más.
A la par de la disminución en el pronóstico de crecimiento, los analistas consultados por el Banco de México subieron el nivel de tipo de cambio previsto para el cierre del año, que ubicaron en 16.75 pesos por dólar, superior al de la encuesta del mes previo, cuando lo situaron en 16.36 pesos por unidad de la divisa estadunidense. Para el cierre del próximo año modificaron su previsión de 16.01 a 16.32 pesos por dólar.
Los analistas consultados por el Banco de México esperan que este año la inflación, medida por el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), sea de 2.75 por ciento, menor a la prevista en la encuesta del mes previo, que fue de 2.82 por ciento. Para 2016 anticipan una variación del INPC de 3.43 por ciento, poco más de 3.40 por ciento pronosticado en la encuesta de agosto.
El pronóstico de inflación para este año ubica el crecimiento de los precios en un nivel inferior al objetivo del banco central, que es de 3 por ciento.
La encuesta fue levantada entre el 22 y el 30 de septiembre y en ella participaron especialistas de 36 grupos de análisis y consultoría económica del país y del extranjero.
La expectativa de los especialistas para el tipo de cambio sigue absorbiendo buena parte de la incertidumbre en el entorno actual de volatilidad financiera, opinó Luis Armando Jaramillo-Mosqueira, economista senior de Scotiabank. No obstante la depreciación del peso, la inflación esperada se mantiene con tendencia a la baja para 2015 y con un moderado repunte hacia 2016, sin que se espere un traspaso importante desde el tipo de cambio, añadió.
Por quinto mes consecutivo, en septiembre la expectativa de tipo de cambio continúa como la variable más afectada en el actual entorno de volatilidad, lo que se refleja en sensibles revisiones al alza para el cierre de 2015, a 16.75 pesos por dólar, mientras que para 2016 se espera alcance 16.32 pesos por dólar, comentó.
La analista de Ve por Más dijo sobre este tema que debido a la alta volatilidad los especialistas revisan la previsión de tipo de cambio para el cierre de este año y para 2016, debido a la incertidumbre sobre cuándo comenzará el incremento de tasas de interés en Estados Unidos.
Un incremento de las tasas en Estados Unidos puede provocar una reversión, así sea moderada, de los flujos de capital que han llegado a México en los recientes años para aprovechar los réditos más altos respecto de aquel país, lo que incrementará la presión sobre el tipo de cambio del peso.