En representación de ejidatarios y comuneros de Morelos, Jorge Zapata González exigió en el Senado cancelar de manera inmediata la construcción de la termoeléctrica de Huexca, proyecto que, dijo, acabará con el agua y afectará el medio ambiente de por lo menos 10 municipios.

Nieto de Emiliano Zapata, responsabilizó al gobernador Graco Ramírez de un posible estallido social, al ignorar el descontento de los afectados por esa obra, que consumirá 50 millones de litros de agua al día.

Acompañado de senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que respaldaron su movimiento, advirtió que van a impedir que se eche a andar la termoeléctrica, y si Graco Ramírez llama a la fuerza pública para intentar concluir el último tramo del acueducto, “donde tenemos un plantón desde el 18 de abril pasado en Apatlaco, ese será el momento de manifestarse en contra del proyecto.

Y ahí es cuando nosotros ya no vamos a hacer nada por detener a la gente que desea ir a dinamitar esas construcciones, porque tenemos muchos inconformes que han querido ir a destruir los cárcamos edificados, pero hasta ahorita, gracias a Dios, nos han hecho caso y no se ha cometido ese delito, supuestamente federal, señaló.

Agresiones y engaños

Los pueblos de Morelos ya están organizados. Estamos esperando la embestida del gobierno estatal, como lo hizo en 2012, cuando construyó los cárcamos, entonces puso granaderos, con un metro de distancia uno de otro, la maquinaria trabajando en medio. Se golpeaba a todo el que se oponía al acueducto y al gasoducto.

Abundó: No estamos solos, contamos con el apoyo de gente de varios estados, y con unas 60 organizaciones de Morelos. Estamos dispuestos a llegar a los chingadazos, vamos a agarrar el toro por los cuernos y a ver de cómo nos toca.

Señaló que Graco Ramírez ha engañado a ejidatarios, promovido asambleas falsas; es una vergüenza lo que hace en Morelos, cuna del agrarismo. Esto podría ser el detonante para su salida, recalcó.

En ese contexto, en el que señaló engaños de la autoridad, agresiones, saqueo de recursos y ahora el peligro de que se queden sin agua, advirtió: Que se atengan a las consecuencias; estamos dispuestos a que corra sangre, tanto de nuestro lado como del de ellos. No va a ser tan fácil que nos despojen de la tierra y del agua; Morelos siempre se ha distinguido por defender lo que es suyo.

Lo único que le queda al gobernador Graco es renunciar al cargo, porque le quedó grande la silla, sostuvo.

Por su parte, el senador Alejandro Encinas señaló que no sólo hay movilización social en el oriente de Morelos, sino también en otras entidades. En el caso morelense, el conflicto está vinculado a la construcción de una planta termoeléctrica en la comunidad de Huexca, donde se pretende utilizar más de la mitad del agua del caudal del río Cuautla, que actualmente beneficia la actividad productiva de esa y otras comunidades de la región.

Destacó que es un tema que se volvería recurrente en el país por el injusto e ilegal despojo de las comunidades en materia de agua, tierra y bosques que lamentablemente con las reformas en materia energética, en especial de hidrocarburos, se presentan ya en varios estados.

Miguel Barbosa, coordinador de los senadores del PRD, resaltó que el apoyo a los comuneros y ejidatarios de Morelos es unánime.