Querétaro, Qro.

Al rendir protesta como gobernador para el periodo 2015-2021, Francisco Domínguez Servién dio a conocer que el estado arrastra un déficit presupuestal sin precedente y un gasto corriente insostenible.

Seis años fueron suficientes para abrir un agujero financiero de 650 millones de pesos que compromete el futuro de Querétaro, explicó el ex senador panista, luego de anunciar que acabará con esa política financiera irresponsable y emitirá un decreto para que lleguen el orden y la austeridad.

También advirtió que no habrá perdón para el pasado. Ofreció enterrar la corrupción para siempre y se comprometió a hacer un gobierno honesto, franco y profesional.

Domínguez rindió protesta ante diputados locales, quienes en esta ocasión sesionaron en el Teatro de la República, con la asistencia del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien en representación del presidente Enrique Peña Nieto manifestó en breve entrevista que la administración federal promoverá una relación de coordinación, colaboración y apoyo con el nuevo mandatario.

La ceremonia reunió a la clase política queretana, sobre todo a la del Partido Acción Nacional: llegaron casi todos los senadores panistas y la cúpula del blanquiazul, encabezada por Ricardo Anaya. De igual manera estuvieron los aspirantes a la candidatura presidencial Margarita Zavala y Rafael Moreno Valle, gobernador de Puebla; los mandatarios de Chiapas, Manuel Velasco; Guanajuato, Miguel Márquez; estado de México, Eruviel Ávila, y el electo de Nuevo León, Jaime Rodríguez El Bronco, así como el jefe del Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, entre otros. Este último arribó minutos antes de concluir el acto.

El panista anunció la desaparición del sistema Red Q, que se convirtió en un freno para el desarrollo del transporte público. Reconoció más adelante que la inseguridad en el estado ha crecido. Negarlo, ya hemos visto, hace imposibles las soluciones. Anunció un programa de prevención del delito basado en uso de tecnología y trabajo de inteligencia.

El gobernador dijo tener carácter para enfrentar a la delincuencia. Habrá firmeza y determinación, visión y coordinación, rapidez y justicia. No me va a temblar la mano. Lo digo fuerte y claro: con la tranquilidad de los queretanos no se juega.

Domínguez Servién agregó que los programas sociales dejarán de ser redes de votos para convertirse en redes de bienestar, y pidió a los empresarios invertir en Querétaro.

De igual manera, puntualizó que en su gestión no habrá espacio para la deshonestidad y se pondrá luz a todo aquello que estaba en la oscuridad. No habrá perdón para el pasado ni oportunidad para el abuso futuro, y tampoco habrá fueros políticos. Desde este estado comienza la renovación profunda de la ética pública de la nación, aseguró.

Al terminar la reunión, en la que estuvo acompañado por su esposa e hijos, y por el ex candidato presidencial Diego Fernández de Cevallos, el mandatario se trasladó a la plaza de armas, en donde dio a conocer su gabinete, en el que figuran seis ex colaboradores de la administración del panista Francisco Garrido Patrón, entre ellos el ex procurador Juan Martín Granados Torres, quien ahora será secretario de Gobierno.