Madrid.

El refugiado sirio Osama Abdul Mohsen y sus hijos Zaid, de siete años, y Mohammad, de 18, cumplieron su sueño de conocer al portugués Cristiano Ronaldo, del Real Madrid, quien es su máximo ídolo futbolístico.

El pasado jueves tuvieron un encuentro con el presidente del equipo, Florentino Pérez, y visitaron el estadio Santiago Bernabéu, pero ayer pudieron convivir con la plantilla merengue en La Ciudad Real Madrid.

Tras escapar de la guerra en Siria y de haber sido agredido por una camarógrafa de Hungría, Mohsen y sus hijos pudieron fotografiarse y conversar con el astro madridista en el campo de entrenamiento de la ciudad deportiva de Valdebebas, donde también tuvieron la oportunidad de conocer a Pepe, Kiko Casilla, Denis Cheryshev, Luka Modric, Toni Kroos y Lucas Vázquez.

Asimismo, el Real Madrid invitó a la familia de refugiados al encuentro de este sábado ante Granada, correspondiente a la cuarta jornada de la liga española.

Desde el primer momento el conjunto blanco se solidarizó con los refugiados acogidos por España y el pasado 5 de septiembre informó sobre la donación de un millón de euros para apoyarlos.

Por otro lado, el Barcelona, actual campeón de Europa, puso en marcha una campaña de recaudación de fondos en colaboración con la Cruz Roja para ayudar a los refugiados que están llegando al viejo continente.

El Barça quiere implicar a toda la masa social (socios, aficionados y peñistas), sus deportistas (jugadores de los equipos profesionales y técnicos) y agentes económicos (patrocinadores y proveedores) para obtener recursos y hacer las donaciones a la benemérita institución, que atenderá las necesidades de los refugiados, anunció el club en un comunicado de prensa.

Agregó que las estrellas del equipo, como el argentino Lionel Messi y el brasileño Neymar, estarán al frente de la campaña publicitaria para recaudar dinero para el proyecto que se pondrá en marcha el próximo domingo, en el duelo ante Levante.

En tanto, la Unión Europea de futbol, en la reunión que realiza en Malta, aprobó una donación de 2 millones de euros para ayudar a niños inmigrantes.