Una explosión acabó con el edificio principal y varias columnas, informan
El secretario general de la organización y la Unesco califican ese acto de crimen de guerra
Un miliciano del Estado Islámico dijo mediante una videollamada que nada quedó del recinto
Martes 1º de septiembre de 2015, p. 6
Ginebra/Beirut/Damasco.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) confirmó ayer que varias imágenes satelitales muestran que el templo de Bel, en el yacimiento de Palmira, en Siria, fue destruido por milicianos del Estado Islámico (EI).
Podemos confirmar la destrucción del principal edificio del templo de Bel, además de varias columnas en sus inmediaciones
, informó el Instituto de las Naciones Unidas para Formación Profesional e Investigaciones (Unitar), que comparó imágenes obtenidas antes y después de una potente explosión registrada el lunes.
Antes, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos comunicó que el EI destruyó parte del templo de Bel.
Un análisis de satélite confirma que el principal edificio del templo de Bel en Palmira fue destruido
, informó en Twitter Unosat, programa de aplicaciones satelitales.
Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, y la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) calificaron de crimen de guerra esa destrucción.
El hecho sucedió a una semana de que los islamitas derrumbaran el templo de Baal Shamin, en la ciudad antigua.
El domingo el director de Antigüedades y Museos de Siria aseguraba que la parte central del templo de Bel seguía en pie, a pesar –dijo– de las informaciones de grupos activistas que apuntaban que había sido completa o parcialmente destruido por los yihadistas del Estado Islámico (EI).
Tenemos información de nuestra gente en Palmira de que hubo una explosión dentro de los muros del templo de Bel, pero de que su edificio central todavía está en pie
, dijo el arqueólogo jefe sirio, Mamoun Abdulkareem, desde Damasco.
Sin embargo, este lunes, el funcionario se mostró más prudente. Según las informaciones que hemos aunado, los yihadistas del EI provocaron una explosión el domingo en el patio del templo
, pero la parte cerrada y la columnata frontal están intactas
, declaró.
Es el templo más hermoso, con un patio inmenso; tiene 43 mil metros cuadrados, y los yihadistas no autorizaron al personal de los servicios de Antigüedades acercarse
, añadió.
El domingo activistas del grupo de Coordinación de Palmira aseguraron que el espacio interior del templo había volado por los aires.
Varios activistas, incluso un residente de Palmira, informaron el domingo que un bombardeo del grupo Estado Islámico dañó considerablemente al templo de 2 mil años de antigüedad.
El residente describió una enorme explosión y agregó que vio imágenes del daño, pero no logró acercarse al sitio.
Edificio de 2 mil años
Según el director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, Rami Abdel-Rahman, algunos testigos vieron una explosión dentro de los muros fortificados del santuario, pero no se aproximaron a la zona para ver exactamente qué daños se produjeron por temor a los combatientes de EI, explicó.
Abdulkareem advirtió que el templo todavía corre peligro por la presencia de los yihadistas, que recientemente destruyeron otro más pequeño de Palmira, antigua ciudad que la Unesco declaró patrimonio de la humanidad en 1980.
Ya advertimos antes y reiteramos ahora que el templo de Bel está en peligro por la presencia de esos milicianos en la zona
, apuntó.
El templo romano de Bel tiene 2 mil años de antigüedad y está ubicado fuera de la zona principal de la antigua Palmira. Su cámara principal, ricamente decorada, estaba muy bien conservada.
No obstante, Mamoun Abdulkareem confirmó que sin duda
hubo una explosión enorme cerca del templo que está en los alrededores de una amplia zona de ruinas romanas, pero agregó que sigue sin estar clara la extensión del daño.
Un miliciano del Estado Islámico dijo el lunes a través de Skype que el templo había quedado destruido, sin ofrecer más detalles. El insurgente habló bajo condición de anonimato, porque los integrantes del grupo no están autorizados para hablar con periodistas.