Alemania y Francia buscan una postura común frente a la crisis
Martes 25 de agosto de 2015, p. 24
Miratovac.
A pie, exhaustos y después de hacer largas filas, unos 2 mil migrantes, en su mayoría provenientes de Siria, ingresaron este lunes a Serbia para sumarse a otros 5 mil que desde el sábado llegaron en masa a esta localidad fronteriza con Macedonia, con el propósito de abordar trenes y autobuses que los trasladen a Hungría, el final de la ruta migratoria de los Balcanes y puerta de entrada de la Unión Europea.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) informó que 7 mil personas llegaron en Miratovac, muchas desesperadas después de pasar tres días en territorio griego, debido a que el gobierno macedonio demoró la autorización de tránsito hacia el norte. Grecia, que atraviesa por una severa crisis económica y financiera, declaró este lunes que su infraestructura es insuficiente para lidiar con la ola de migrantes.
Antes de continuar su camino de Miratovac a la localidad serbia de Presevo, donde recibieron atención médica, los migrantes tuvieron que caminar 5 kilómetros. La mayoría lleva sus escasas pertenencias en mochilas y los niños son llevados en hombros por sus padres o familiares mayores.
Mi destino final, con suerte, es Alemania
, dijo Ahmed, un sirio que resume las intenciones de muchos de sus compañeros de viaje.
Desde el colapso de Yugoslavia en la década de los 90, la península de los Balcanes y toda Europa no habían experimentado un movimiento masivo de migrantes de estas dimensiones.
La ruta balcánica se convirtió este año en la más concurrida de Europa, a pesar de que el punto final del recorrido, Hungría, se ha declarado contra la inmigración indocumentada.
En Berlín, la canciller federal alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande, se reunieron para buscar una postura común y solidaria
a esta crisis migratoria.
Merkel condenó los disturbios protagonizados por bandas de neonazis el fin de semana en Heidenau, pequeña población cercana a Dresde, donde atacaron a guardias de un albergue para inmigrantes.