Diariamente, mientras la mayoría de la población duerme, el Circuito Interior es intervenido. Un ejército de 206 mujeres y hombres bachean, barren, limpian parapetos, cambian luminarias, arreglan banquetas y recolectan basura en la madrugada.

Sus armas: escobas, cubetas, jabón, cable, medidores de corriente y pinzas, apoyadas con máquinas para romper el asfalto, hacer la mezcla y colocarla, son utilizadas para cumplir con la orden de atender el tramo asignado, llueva, truene o relampaguee, y lo logramos.

Un grupo de bandereros coloca trafitambos y vigila que los automovilistas no rompan la valla e intenten pasar a la zona de guerra, lo cual muy pocas veces ha sucedido, pues somos un equipo y como tal nos protegemos; tenemos a la fecha saldo blanco.

Gabriel Ramírez, supervisor de proyectos especiales de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse), está pendiente de que las 11 brigadas distribuidas en el primer anillo de distribución de viajes a diez delegaciones cumplan con su labor, de las 23 a las 5 horas.

El continuo robo de cable de aluminio y cobre provoca que alguna zona quede oscura, lo cual se resuelve en horas, como parte del contrato firmado con el consorcio Operadora y Mantenimiento del Circuito Interior, que está en promedio 95 por ciento iluminado.

No se trata de parchar

Carlos Ríos, encargado de la cuadrilla de alumbrado público de la firma, explicó que otros problemas que enfrentan son daños a luminarias en la vialidad o bajopuentes y el cambio de postes, por accidentes o robo, cuyos responsables se desconocen en la mayoría de casos.

Un grupo de mujeres lava parapetos y señalizaciones en 700 metros lineales, que es su jornada nocturna de ocho horas, por un pago de mil pesos semanalesFoto Luis Humberto González

Un grupo de mujeres lava parapetos y señalizaciones en 700 metros lineales, que es su jornada nocturna de ocho horas, por un pago de mil pesos semanales. Otros sustituyen la malla ciclónica, que es rota para cruzar, o atienden banquetas, guarniciones y grafitis.

Otras brigadas son las de barrido manual y mecánico y bacheo. Esta última, explicó Erick Martínez, atiende de uno a tres casos, según el tamaño, la zona y la afectación, pues no se trata de parchar, sino de mantener en buenas condiciones la pista de rodamiento.

Con la firma de un contrato por 12 años con el consorcio, por 6 mil 500 millones de pesos, se garantiza el mantenimiento de la infraestructura actual y nueva del Circuito y la realización de seis obras viales en tiempo récord, destacó Ricardo Olvera.

El director de Proyectos Especiales de Construcción de la Sobse precisó que tres están en funcionamiento en la delegación Iztacalco; están en construcción los pasos a desnivel de Tlalpan, se iniciará el deprimido de Revolución y se terminará la rampa de la misma avenida, con lo cual se tendrá una vialidad controlada de 34 kilómetros.

Mencionó que el contrato por pago por prestación de servicios (PPS) vigente desde 2013 y hasta 2025 garantiza el mantenimiento ininterrumpido del Circuito, que cerrará, después de tres décadas, con seis obras viales en un lapso de tres años, en beneficio de 327 mil usuarios, con el pago diferido de las mismas a lo largo del tiempo de vigencia.