Buenos Aires.

Será la fiesta de River Plate, piensan en los Tigres, cuyo plantel arribó ayer a Buenos Aires desde Monterrey para jugar la final decisiva de la Copa Libertadores. Pero no llegan asustados, insisten en el cuadro regiomontano, porque tienen la convicción de ganar el primer título de este torneo para México.

No nos asusta la cancha de River porque creo que llegamos con las cosas claras; sabemos que va a ser complicado, que es un equipo difícil, que jugar aquí (en Buenos Aires) no es fácil, pero venimos con la mentalidad de llevarnos el título, dijo Aquino, quien por una lesión había quedado marginado del partido de ida. ¿Asustarnos? De ninguna manera, aseguró.

El volante señaló que no les preocupan las bajas que sufrió River en días recientes. Sabemos que tienen jugadores muy buenos para suplir a su gente, nosotros estamos con equipo completo para la final, declaró.

En tanto, el centrocampista Egidio Arévalo instó a estar tranquilos, no desesperarse y jugar bien. Ya hemos venido en fase de grupos y ya todos saben lo que es el (estadio) Monumental, pero ahora será otro entorno, va a ser su fiesta, pero nosotros estamos convencidos de lo que queremos.

Tigres, dirigido por Ricardo Tuca Ferretti, es el tercer equipo mexicano en jugar la final de la Libertadores. Los anteriores fueron Cruz Azul, en 2001, cuando perdió la final en penales ante Boca Juniors, y Chivas de Guadalajara, que cayó frente al Inter de Brasil.

River, que en el Monumental ganó los títulos continentales de 1986 y 1996 y recientemente la Copa Sudamericana, sufrirá varias bajas por lesiones, como el delantero uruguayo Rodrigo Mora y su compatriota Tabaré Viudez. Además, por suspensión, el defensor Gabriel Mercado tampoco podrá alinear.

En tanto, el técnico de River Plate, Marcelo Gallardo, anunció el once titular, con Fernando Cavenaghi en el ataque.

Anticipó que será una final memorable, en la que River buscará el protagonismo de local frente a un Tigres que podría apelar a peligrosos contragolpes.

Tigres es un buen equipo, tal vez venga en una posición en la cual ellos no quieran asumir el protagonismo porque sabemos que jugamos en nuestra casa, declaró el técnico. Nosotros acá tenemos que ser más fuertes de lo que fuimos en México, tratar de jugar el partido lejos de nuestro arco, agregó.

La clave para que los millonarios conquisten su tercera Copa Libertadores será combinar su estilo ofensivo con una buena defensa.

Respeto a Tigres, a su calidad de jugadores y a su entrenador. Pero en lo primero que pensamos es en lo nuestro. Si estamos bien metidos en el partido, cosa que va a suceder, trataremos de que Tigres con sus jugadores de calidad no nos dañe demasiado, alertó.

El entrenador remarcó que el cuadro de la Universidad Autónoma de Nuevo León no es uno de los equipos más poderosos de la Copa Libertadores, sino el más poderoso. Fue el que más dinero invirtió en reforzarse.