Las medidas adoptadas el jueves por la Comisión de Cambios, integrada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Banco de México (BdeM), detuvieron la caída del peso. El dólar libre, en ventanillas de bancos y casas de cambio, retrocedió este viernes 20 centavos frente a la moneda mexicana; al cierre la divisa estadunidense se vendió en 16.40 pesos contra los 16.60 pesos de la jornada anterior.

El BdeM asignó 200 millones de dólares en siete posturas a un tipo de cambio ponderado de 16.0116. El Banco Central proporcionará al mercado un monto de 200 millones de dólares diarios sin precio mínimo, a partir de este 31 de julio y hasta el 30 de septiembre de 2015, con lo que se ponen en la mesa, durante ese lapso, 8 mil 600 millones de dólares para apuntalar al peso en este periodo de volatilidad cambiaria internacional.

La divisa al mayoreo, para operaciones de más de 10 mil dólares, cerró esta semana en 16.0772 con lo que el peso se apreció 1.2 por ciento con relación al lunes pasado.

A un día de que la Comisión de Cambios anunció el aumento de las subastas diarias de dólares a 200 millones, para contener la caída del peso, la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) consideró que la medida muestra ya sus primeros efectos directos en la estabilidad económica del país.

El presidente del organismo empresarial, Rodrigo Alpízar Vallejo, dijo que la decisión amortigua la velocidad con que se pudiera debilitar el tipo de cambio en una sesión, pues evitará que se rebase la barrera sicológica de 17 pesos por dólar.

Alpízar indicó que ante la expectativa por la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por sus siglas en inglés) de elevar su tasa de interés, el gobierno federal y el Banco de México actúan para darle liquidez al mercado y reducir la volatilidad.

Hay una reducción de 22 centavos en la cotización, pues ayer se estabilizó en 16.55 pesos por dólar, comentó dirigente empresarial.

El presidente de Canacintra pidió a autoridades mantener comunicación permanente con la ciudadanía para mitigar la percepción de incertidumbre.

Este mes, los movimientos del tipo de cambio estuvieron determinados por la expectativa de alza a la tasa de referencia de la Fed, la especulación sobre una posible salida de Grecia de la eurozona y un periodo de inestabilidad en el sistema financiero de China, comentó Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base.

El peso cerró julio con una depreciación de 2.39 por ciento, o 37.6 centavos, al cotizar alrededor de 16.11 pesos por dólar y tocar un nuevo nivel histórico de 16.4890 pesos. Este aspecto se dio en 11 de 23 jornadas, lo cual equivale a la mitad de las sesiones de julio.

Siller destacó que este mes el peso estuvo lejos de ser la divisa más depreciada frente al dólar, posición que ocupó el real brasileño, que retrocedió 10.33 por ciento frente a la divisa estadunidense en julio. La moneda canadiense también tuvo una importante caída de 4.67 por ciento.

Los fuertes movimientos del tipo de cambio de semanas recientes se deben a aumentos en posturas especulativas en favor del dólar, añadió.