Brasilia.

La policía brasileña cateó la casa del ex presidente y actual senador Fernando Collor de Melo (1990-1992), como parte de una acción que incluyó 53 operaciones en siete estados, a fin de evitar que se destruyan pruebas en la causa de corrupción en la estatal Petrobras.

Se trata de la ejecución de búsqueda y captura que compromete a políticos bajo sospecha de haber aceptado sobornos en un escándalo de corrupción, se informó en comunicados de la policía y fiscales federales, sin precisar los nombres de los investigados.

El caso de corrupción costó más de 2 mil millones de dólares en pérdidas a Petrobras y es la mayor investigación por esa causa en la historia del país.

Las operaciones fueron ordenadas por la Corte Suprema, la más alta autoridad judicial de Brasil y la única que puede ordenar que se investigue a políticos. Los cateos abarcaron casas, oficinas, sedes de corporaciones, bufetes de abogados y organismos públicos, informó la policía.

La red de televisión Globo dijo que la policía llevó a cabo búsquedas en una de sus filiales locales, Tv Gazeta, donde Collor de Mello es accionista mayoritario.

En un comunicado la policía dijo que las operaciones del martes se realizaron en siete estados: Bahía, Pernambuco, Alagoas, Santa Catarina, Río de Janeiro, Sao Paulo y en el Distrito Federal.

Las medidas son necesarias para el esclarecimiento de los hechos investigados en el ámbito del Supremo Tribunal Federal, siendo que algunas son para garantizar el resguardo de bienes adquiridos mediante una posible práctica delictiva y rescate de pruebas relevantes que podrían ser destruidas en caso de no ser incautadas, dijo el procurador de la República, Rodrigo Janot, en un comunicado.

Collor, quien renunció a la presidencia poco antes de que el Congreso votara su destitución por corrupción, calificó de invasiva y arbitraria la operación, que a su juicio busca alimentar el clima de terror y persecución para intimidar a futuros testigos, según un comunicado de su defensa divulgado en su cuenta de Twitter.

La medida invasiva explica los tiempos en que vivimos, en que un estado policial procura imponerse menoscabando las garantías individuales, sea un ex presidente, un senador de la república o un simple ciudadano, añadió.

Los cateos se realizaron tanto en su residencia en Brasilia como en la de Alagoas (noreste), estado que representa en el Senado, y al igual que los restantes procedimientos, tuvieron como objetivo principal evitar que pruebas importantes sean destruidas por los investigados, explicó la policía en un comunicado.

Durante la operación en la capital fueron incautados tres autos de lujo, un Ferrari, un Lamborghini y un Porsche, que según la prensa pertenecen al senador.