El Gobierno del Distrito Federal (GDF) informó que los participantes en el debate digital y las mesas de trabajo sobre la prestación del servicio individual de transporte de pasajeros por medio de dispositivos móviles estuvieron de acuerdo en buscar una regulación moderna que considere a todos los actores y permita la coexistencia.

Ahora se incorporará la opinión ciudadana a la estrategia de regularización y competencia justa, que ya se prepara, con el fin de nutrir la construcción de un innovador marco regulatorio y romper el paradigma de las decisiones gubernamentales a puerta cerrada, precisó.

Diariamente se realizan más de 22 millones de viajes, de los cuales uno de cada 20 es en taxi, por ello es importante realizar este ejercicio, cuyas recomendaciones se abren al público para contar con un documento final el 26 de junio.

En las recomendaciones dadas a conocer por el Laboratorio de la Ciudad de México, se plantea una autorregulación, incentivar la innovación y la calidad de los servicios, donde el gobierno funcione como garante de su cumplimiento.

En la mesa Competencia justa e innovación se exigió evitar monopolios, compartir datos generales en las plataformas y regular el trabajo desde una perspectiva ambientalista.

Cabify y Uber expresaron su disposición de contribuir económicamente para fondos de movilidad y mejoras viales, ante los efectos colaterales urbanos que pudieran generarse con su incorporación al servicio.

En la mesa Tecnología inclusiva, taxistas exigieron un equilibrio en los costos de operación, eliminar trámites obsoletos, como la cromática y la revista, simplificación administrativa, replantear el control de calidad de los prestadores de servicio y revisar el sistema actual de tarifas.

Reducir el uso del auto particular

Asimismo, implementar una carta de derechos para el usuario y transparentar el diseño de políticas. En tanto, en la mesa Retribución cívica, taxistas, investigadores y especialistas propusieron impulsar políticas que reduzcan el uso del auto particular.

Un esquema donde los conductores paguen una cuota por ingresar a zonas de alta congestión vehicular, aplicar el impuesto a la gasolina, que las empresas que operen con aplicaciones paguen impuestos en función de los kilómetros recorridos sin pasajero, y un pacto de movilidad.

Plantearon que las autoridades colaboren con la Comisión Federal de Competencia Económica para regular posibles controversias futuras.

Por la mañana, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, se mostró confiado en que el resultado de las mesas de debate sobre la operación de empresas como Uber y Cabify en el servicio de transporte público individual será satisfactorio y permitirá encontrar una ruta para mejorar el servicio de taxis en beneficio de los ciudadanos.

Agregó que el propósito es encontrar los mecanismos que permitan una competencia en la que haya piso parejo para todos, y de esta forma alcanzar una mejoraría en el servicio.