Diversos militantes y corrientes del Partido de la Revolución Democrática (PRD) expresaron descontento con su dirigencia nacional por la derrota estrepitosa sufrida en la pasada jornada electoral.

Coincidieron en que los factores que incidieron en los resultados son la falta de democracia interna, un desplazamiento del partido hacia la derecha a partir de la firma del Pacto por México, un pésimo ejercicio de gobierno en el Distrito Federal, las elecciones internas de 2014 y la crisis en Guerrero tras la desaparición de normalistas de Ayotzinapa.

Los balances se han emitido tanto en reuniones intrapartidarias como en las redes sociales, y provienen de perredistas de distintas expresiones.

Izquierda Democrática Nacional (IDN) recordó por escrito que la crisis derivada de la firma del Pacto por México y los hechos en Guerrero llevaron a la salida del PRD de muchas figuras y militantes, empezando por Cuauhtémoc Cárdenas, fundador del partido, y citó a Marcelo Ebrard, a quien se le bloqueó toda posibilidad de ser candidato, además de la persecución en su contra por parte de Miguel Ángel Mancera (jefe de Gobierno del Distrito Federal).

Planteó que el esquema de definición de candidaturas se ha agotado en el PRD y que pretender “casi desaparecer a diversas expresiones como Movimiento Progresista y la propia IDN tuvo su costo e impacto en la elección.

Voto de castigo en el DF

Muchos cuadros buscaron otras opciones, como Movimiento Ciudadano, o se sumaron a las campañas de Morena ante la imposición de candidaturas, la elección de muy malos candidatos y la política de exterminio, apuntó la corriente de René Bejarano. También afirmó que el PRD recibió en la capital del país un rotundo voto de castigo y la ciudadanía reprobó al gobierno de Mancera y con ello al mismo partido.

Añadió que además hubo “rechazo a los gobiernos delegacionales llenos de denuncias de corrupción… Este 7 de junio se pagó el costo de los errores, la soberbia, la corrupción y la falta de estrategia y conducción política”. En cuanto a Guerrero, apuntó que el costo de los hechos en el municipio de Iguala y la ausencia de una política de alianzas abrieron la puerta para la derrota.

A su vez, en Facebook, Fernando Guzmán, secretario de Políticas Alternativas de Seguridad Pública del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido, escribió que la derrota del PRD en la ciudad de México no fue el 7 de junio, “fue el día que se le entregó la candidatura a un protopriísta que ahora cree que llegó solo”.

Manifestó que los ciudadanos votaron en contra de su pésimo gobierno, del aumento al (precio del) Metro sin tener resultados, de un Estado policial que criminaliza la protesta social y muchas prácticas que lastiman los avances democráticos en nuestra ciudad.

Manuel Oropeza, ex dirigente del PRD capitalino, apuntó que “el gobierno del Distrito Federal y la dirección del PRD deberían asumir el mensaje de la ciudadanía –el voto de castigo– para replantear el rumbo… Hay poco tiempo, si no se ajusta, se pagarán las consecuencias en 2018”.

En tanto, Marlon Berlanga, militante, manifestó que debe entenderse el costo de haber firmado el Pacto por México. La pregunta es si la gente que se informó sobre este pacto sentenció que éramos iguales que el PRI y el PAN, y entonces voltearon a ver a Morena y otros partidos como la verdadera oposición, castigándonos con la negación de su voto a nuestro favor. ¿Los responsables asumirán su grave error?

José Antonio Rueda, ex integrante del CEN, dijo en entrevista que era previsible la derrota estrepitosa del partido, y consideró que va a crecer la demanda de que renuncie Carlos Navarrete (como presidente nacional), en la perspectiva de que el partido va bajando cada vez más sus posibilidades de crecimiento.