Cancún, QR.

Dos primos hermanos identificados con las iniciales JCRG y ROR, ambos de 13 años, acusados de violar a seis de sus parientes, incluso a una de dos años, fueron liberados este domingo luego de pasar tres días en la casa hogar del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del municipio de Isla Mujeres.

Los adolescentes, vecinos de la colonia irregular Nueva Jerusalén, habrían violado a seis primas y hermanas suyas de entre siete y 15 años –una está embarazada, aparentemente como resultado de una agresión sexual–; la más reciente sería VNPR, de dos años.

María de Jesús Rodríguez Gerónimo, madre de VNPR, encabezó este domingo una marcha por las calles de Cancún, la cabecera municipal de Benito Juárez, para exigir castigo a los muchachos, poco antes de que se le notificara, al filo de las 13:30, que sus sobrinos fueron liberados.

Comentó que los presuntos agresores regresaron recientemente de Tabasco, adonde los envió su familia porque se habían vuelto insoportables e incontrolables, pero nunca dijeron el verdadero motivo: agresión sexual contra otras familiares, y pese a saberlo, calló la abuela (cuyo nombre no dio a conocer) y hasta prohibió denunciar, porque las cosas de la familia se quedan en familia.

Sostuvo que el jueves anterior, cuando su niña estaba sin supervisión de un adulto, los chicos abusaron de ella en su propio hogar. Los adolescentes, apoyados por sus respectivas madres, niegan los hechos, pero la niña los acusa de haberla lastimado, además se hallaron rastros de sangre en el pañal de la pequeña, a quien se sometió a pruebas por las cuales se halló en sus genitales semen que se determinó correspondía a los presuntos violadores.

María de Jesús inició de inmediato la averiguación previa 232/2015 contra sus primos ante la procuraduría de Quintana Roo. Adelantó que continuará con el proceso legal, pues, además de exigir justicia para su hija, pretende evitar que sus familiares incurran en nuevas agresiones; de igual manera, aseguró que JCRG y ROR no terminaron la primaria, no trabajan ni estudian, y consumen drogas.

Añadió que la abogada que llevaba su caso, Patricia Salazar, al parecer la abandonó, pues quedaron en verse ayer a las 11 de la mañana para presionar a la juez que lleva el caso a no liberar a los menores, y no se presentó.

Ambos implicados quedaron bajo la tutela de sus padres, quienes deberán llevarlos a terapia sicológica y acompañarlos a las audiencias a las que sean citados.